En la noche del miércoles se descarrilaron tres vagones de un tren de la Administración de Ferrocarriles del Estado (AFE) en la Estación Solís, en Minas, Lavalleja. Los 19 vagones iban cargados de portland de Ancap, y la operación estuvo a cargo de la empresa paraestatal Servicios Logísticos Ferroviarios (SELF).

En el tren viajaban un maquinista, un ayudante y un mecánico, pero ninguno de ellos resultó herido. Sólo se volcó el contenido de uno de los tres vagones que descarrilaron.

Hasta ahora no se pudo determinar la causa del accidente, aunque se descarta que haya sido por exceso de velocidad. Mariano Pouso, vicepresidente de la Unión Ferroviaria, indicó a la diaria que todavía no hay un informe del Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP) sobre lo ocurrido. Según Pouso, AFE está “muy debilitada” desde que, en la Rendición de Cuentas de 2022, algunas de sus potestades pasaron a estar bajo la órbita de la Dirección Nacional de Transporte Ferroviario del MTOP . La compañía ferroviaria se quedaría con el control del transporte de pasajeros y la empresa SELF con el transporte de carga.

Antes, en AFE se creaba una “comisión conformada por gerentes de diferentes reparticiones, algunos técnicos, inspectores de máquina y de vía, de gerencia general”. De acuerdo con Pouso, esta comisión era la encargada de detectar la causa ante un eventual descarrilamiento, pero “fue gradualmente desarticulada, no se produjeron informes como se hacía”.

“Los trabajadores estamos excluidos de ese organismo, cosa que hemos criticado”, indicó, y agregó que hace unas semanas hubo un choque entre un auto y un tren en el que el primero se interpuso y el segundo lo colisionó, pero dado que el organismo que controlaba no está más, “no hubo ningún informe público de ninguna autoridad al respecto”.

Remarcó que en otros países “cuando ocurre un incidente hay una autoridad que primero da un informe preliminar donde dice qué pasó, cómo pasó, si hay heridos”. “Hay una autoridad que expide un informe público para la prensa, para la ciudadanía, para los operadores, para la administración de infraestructuras”, apuntó.

“Tampoco se cuenta con demasiadas herramientas” para determinar las causas del accidente, lamentó. “Acá la investigación tiene que ser hecha por un organismo que esté por encima de los operadores”, dijo, y explicó que si los operadores hubiesen cometido una falta, no hay garantías de que estos “cuenten realmente lo que pasó”.

“Si el tema es civil, el operador le va a echar la culpa a la vía o va a decir que desconocen las causas porque su tren hizo lo correcto”, remarcó. Si es al revés, quien está a cargo de la infraestructura “va a decir que hay indicios de que iban demasiado rápido y la culpa era del operador”, continuó.

“Al final no termina nadie teniendo la culpa y los accidentes pueden continuar ocurriendo”, advirtió, y resaltó que por eso “hay que generar un mecanismo sólido de un organismo que investigue”. A su vez, dijo que los trabajadores no tiene participación en los organismos.

En ese sentido, sentenció que “debería salir un informe del MTOP”, porque es un hecho público. Estimó que en los primeros días de la semana que viene se va a poder retirar el vagón que volcó y así permitir el paso.