Las movilizadoras comunitarias de la Comisión Honoraria de Lucha Contra el Cáncer (CHLCC) denuncian el “desmantelamiento” del área de Educación Poblacional de la institución en el interior del país, por la decisión de la directiva de cesar de su actividad laboral a las 15 funcionarias del interior del país y una de Montevideo a partir del 31 de marzo por “reducción de presupuesto”, según un comunicado que difundieron las movilizadoras a fines de noviembre.

Las funcionarias fueron notificadas de su despido mediante una llamada el 12 de noviembre y luego por telegrama, contó a la diaria Adriana Sierra, movilizadora comunitaria de Colonia. En primer lugar, la directiva había fijado la fecha de cese de actividad para el 31 de diciembre, pero días más tarde les comunicaron que se concretará el 31 de marzo. “Los motivos que aducen son económicos. Reducción de gastos para la institución por problemas financieros que ‘aparentemente’ la institución arrastra. Digo ‘aparentemente’ porque nosotros no tenemos acceso a cifras para corroborarlo, nos manejamos con opiniones”, manifestó Sierra. En ningún momento hubo una reunión entre las funcionarias y la directiva de la CHLCC, “ni siquiera vía Zoom para reunir al grupo entero”, y no dieron más argumentos, dijo.

El área de Educación Poblacional tiene el objetivo impulsar y promover programas de educación para la prevención del cáncer por medio del “fomento de hábitos saludables con el fin de alcanzar un diagnóstico precoz y la prevención de esta enfermedad”, dice el comunicado. Esta tarea es impulsada en el interior del país desde hace 27 años por las movilizadoras comunitarias ‒una por cada departamento‒, que trabajan con organizaciones e instituciones de cada comunidad, tanto en “las ciudades más grandes” como en las localidades pequeñas, dijo Sierra. Aclaró que en Rocha, Río Negro y Cerro Largo ya no había movilizadoras comunitarias porque no se han cubierto las vacantes por jubilaciones o renuncias.

Al despedir a las 15 movilizadoras del interior y una de Montevideo, Sierra planteó que en esta área sólo van a quedar trabajando cuatro personas en la capital y que “si bien en algunas instancias hacen un trabajo parecido”, no se trabaja con la asiduidad y la continuidad que ellas mantienen con la población. La repartición de Educación Poblacional “se desmantelará en el interior”, señaló la funcionaria.

Lo que se pierde

“Las movilizadoras comunitarias tienen una formación especializada en educación para la prevención del cáncer, además de amplia experiencia y capacitación en la promoción de la salud en el territorio”, dice el comunicado. Su enfoque es transmitir a la población “cuál es la información que la va a mantener más saludable” para evitar enfermedades provocadas por la mala alimentación y el sedentarismo. “Recibimos información que es compleja y la traducimos de manera sencilla para que la población se pueda apropiar de ella”, sostuvo Sierra, y mencionó que desde los centros educativos les piden que concurran para transmitirles información a los estudiantes.

Por medio de esas prácticas, se generan procesos de cambio, comentó Sierra. A modo de ejemplo, mencionó que en la prevención del cáncer de mama, luego de varios años de trasmitirles a las mujeres la relevancia “de conocer su cuerpo, de hacer consultas a tiempo e involucrarse”, ellas se apropiaron de la importancia de “mantenerse sanas, cuidadas y controladas”, les “perdieron el miedo a las mamografías” y ahora son “multiplicadores naturales”, porque les transfieren “esa información a la generación siguiente de manera natural, porque lo tienen incorporado”. “Ha cambiado hasta el hecho de hablar del cáncer. Antes la gente no quería ponerle palabras. Hoy en día, después de un largo proceso, eso se logra hacer, y nosotros creemos que es parte a las acciones que hemos impartido desde el Área de Educación Poblacional”, sostuvo Sierra.

Acciones

Las movilizadoras comunitarias le transmitieron a la población con la que trabajan la decisión de las autoridades de la CHLCC y elaboraron una carta que les enviaron a diputados y senadores, al ministro de Salud Pública, Daniel Salinas, y a Presidencia de la República. El 10 de diciembre los diputados del interior del Frente Amplio le elevaron una carta al presidente de la Cámara de Diputados, Martín Lema, para manifestar su “preocupación” por la situación; destacaron los “logros significativos en la tarea de prevención y detección precoz de diferentes tipos de cánceres” de las funcionarias de la CHLCC, dijeron que es “un error” justificar estos despidos por “la necesidad de reducir presupuesto” y argumentaron que es un recorte “inoportuno e innecesario”.

Consultado por la diaria, Robinson Rodríguez, presidente de la CHLCC, respondió que si bien las movilizadoras fueron cesadas, les dijeron que iban “a hacer las gestiones” para que “puedan seguir cumpliendo esa función tan importante en el interior de la República”. Con el fin de “no entorpecer las negociaciones en curso”, Rodríguez se excusó de hacer más declaraciones.