Cultura
Ayer, a los 96 años, falleció la actriz francesa Michèle Morgan, considerada la Greta Garbo del cine galo previo a la Nouvelle Vague. Se distinguió por su rostro misterioso y su mirada desde que debutó a los 18 años, junto a Jean Gabin, en El muelle de las brumas (1938), dirigida por Marcel Carné, con un gran guion de Jacques Prévert y un primoroso blanco y negro. En 1946 ganó el premio a mejor actriz de Cannes por La sinfonía pastoral, adaptación de una novela de André Gide.