Parece necesario desterrar la idea de tener un debate serio con los defensores de esta ley. No les interesa. Su posición es la inercia del sistema establecido.
En el plano político se destaca haber alcanzado las firmas necesarias para activar el mecanismo de referéndum para la derogación de 135 artículos de la LUC, que emerge como el principal logro de la etapa.
En términos regionales, la histórica decisión de abrir la investigación por delitos de lesa humanidad en Venezuela es un precedente importante en tiempos en que los sistemas democráticos parecen estar en retroceso.
El principio de precaución que protege al paciente ha sido suplantado por el principio de permisión que favorece a la industria: esta siempre goza del beneficio de la duda.
Sin dudas, esta ley es regresiva y se impone con un objetivo claro, que es comenzar a destruir todos los logros obtenidos en estos 15 años de gobierno progresista.