El Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS) presentó este lunes a la Federación Uruguaya de Empleados del Comercio y Servicios (Fuecys) un anteproyecto que busca regular el trabajo a través de aplicaciones, tanto de deliveries como de conductores, entre otras ramas.

El ministro de Trabajo, Pablo Mieres, dijo en una rueda de prensa que hay quienes trabajan con empresas unipersonales, como también quienes trabajan en régimen de dependencia. Por ende, la idea es que “todos deben ser protegidos” en sus derechos básicos, en especial, en el derecho al descanso y a tener como interlocutor a una persona en caso de que haya una desvinculación. La propuesta es que explique cuáles son las causas que generaron el cambio en la relación laboral o la desvinculación.

Según Mieres, hay repartidores que trabajan en condiciones de “precariedad”: “Lo que queremos es establecer regulaciones que den garantías”, expresó. Quienes trabajan para las apps tienen, en su mayoría, contratos bajo la modalidad de empresas unipersonales, por lo tanto no depende estrictamente de la empresa.

El proyecto, al que tuvo acceso la diaria, indica que “se decanta por un modelo de regulación que aporte beneficios mínimos a quienes prestan su fuerza de trabajo, sin pronunciarse sobre el problema de la calificación jurídica del vínculo que une a estas personas con las empresas propietarias de plataformas digitales, en tanto pueden existir tanto empleados como trabajadores autónomos que genuinamente trabajen de una u otra forma, en el marco de las actividades reguladas”.

En el artículo 19 del proyecto, el MTSS plantea que los trabajadores autónomos tienen derecho a ejercer la libertad sindical y “a negociar colectivamente con la empresa titular de la plataforma digital para la cual desarrollen sus tareas”. En esa línea, expresaron que podrán suscribir acuerdos colectivos, en relación a condiciones de trabajo y de retribución, “siempre que sean más favorables que las dispuestas por la presente ley”. “Tales acuerdos serán aplicables exclusivamente a los trabajadores firmantes o que formen parte de las asociaciones de trabajadores representantes”, agregan.

A su vez, se añade que los trabajadores autónomos tendrán derecho a todas las prestaciones establecidas respecto de coberturas y beneficios de la seguridad social, “sin perjuicio de otras formas jurídicas que los mismos quieran utilizar para tributar por sus servicios conforme a la normativa vigente”.

En la exposición de motivos, la cartera asegura tener la “convicción” de que este proyecto de ley, además de “ser oportuno, soluciona y brinda garantías mínimas para todos los trabajadores que desempeñan su labor mediante plataformas digitales, otorgándoles una mayor protección, así como brindándoles la posibilidad de negociación para mejorar condiciones de trabajo”.

Críticas

Fabio Riverón, presidente de Fuecys, criticó que en el proyecto no se contempla que los trabajadores estén en una relación de dependencia. El sindicalista dijo a la diaria que la aspiración del proyecto “debería contemplar esa situación”. “Trabajan con el uniforme de una empresa, también es la que le asigna no sólo la comisión, sino la zona donde trabaja, tiene potestad de sancionar en caso de que entiendan que no están cumpliendo con algunas cuestiones muy puntuales, como la entrega del pedido y la recepción de los mismos. Claramente están en una subordinación”, expresó.

En la misma línea, el presidente del Sindicato Único de Repartidores, Andrés Palermo, opinó que el proyecto no implica ninguna relación de dependencia del trabajador con la empresa, por lo tanto ven “mal” que esto no se contemple.

Por su parte, Rodrigo Turturiello, senior legal counsel de PedidosYa, dijo a la diaria que el proyecto “es muy positivo” porque entienden que el sector “necesita una regulación”, sobre todo para dar garantías tanto a los trabajadores como a las empresas. “Hay que saber cuáles son las normas, los aspectos que deben cumplir cada una de las partes y, en ese sentido, creemos que el proyecto cubre en gran medida tanto esa necesidad”, expresó.

Sobre la relación de dependencia, que piden desde el sindicato, en el proyecto no está planteado, algo que la empresa ven con buenos ojos. Según Turturiello, se puede usar un modelo como el otro. En ese sentido, sostuvo que hay unos 2.400 repartidores que están en régimen de arrendamiento de servicios y unos 50 que son dependientes de la empresa.

Para el integrante de PedidosYa, ese modelo es el que “mejor se ajusta” a ese tipo de tareas para una unipersonal porque “da flexibilidad a las dos partes”, algo que valoran. “Valoramos muchísimo esa flexibilidad y creo que los repartidores también”, aseguró.

PedidosYa comenzó con un modelo de relación de dependencia y después, a lo largo del tiempo, con la operativa, según Turturiello, se dieron cuenta de que “en realidad el mejor modelo que se adaptaba a las condiciones de servicios era el de la autonomía”.