La Federación Ancap (Fancap) presentó este viernes la propuesta del sindicato para bajar el precio del combustible. El presidente del gremio, Gerardo Rodríguez, ya había adelantado a la diaria que se trata de una “sustitución de impuestos” y eso fue lo que se desarrolló en la conferencia de prensa.

“Díganme un solo tema que esté en la LUC que tenga efectos negativos”, dijo el presidente Luis Lacalle Pou hace pocos días, y Rodríguez retomó esas palabras para responderle: “Los combustibles, señor presidente, los combustibles”. El sindicalista agregó que desde que se aplicó el mecanismo para fijar los precios dispuesto en la ley de urgente consideración (LUC), el precio de las naftas aumentó casi 30%, mientras que el gasoil subió casi 25%.

El encargado de presentar la propuesta concreta que tiene Fancap fue el asesor del Instituto Cuesta Duarte del PIT-CNT Pablo Da Rocha, que indicó que fue elaborada con el equipo del instituto. Se trata de una “modificación tributaria para que la carga impositiva recaiga en los que tienen mayor capacidad contributiva y avanzar en equidad”, dijo Da Rocha. En el caso de la nafta súper se propone una reducción a la mitad del impuesto específico interno (Imesi), que pase de 40% a 20%, lo que permitiría que el precio de la nafta pase de los 70 pesos actuales a 56 pesos el litro.

En el caso del gasoil se propone también incidir en la carga tributaria, eliminando el IVA como componente del precio -actualmente representa 15%- y que se encuentre otra alternativa para financiar el mecanismo de subsidio del boleto; de esta forma, se pasaría de los 50 pesos actuales a 35 pesos. Para los trabajadores, una alternativa para seguir subsidiando el precio del boleto es que se cree un impuesto a los depósitos bancarios de los uruguayos en el exterior.

Otra sugerencia del sindicato es aumentar el impuesto al patrimonio, “hoy casi inexistente. Entendemos que hay mucho margen para estudiar el actual esquema de exoneraciones, porque la renuncia que hace el Estado con el impuesto al patrimonio es lo mismo que se recauda, o sea que podría recaudarse el doble”.

Asimismo, aseguró que es importante “impulsar y defender a los pequeños y medianos productores de nuestro país, en la medida en que pueden contribuir los que tienen rentabilidades netas muy altas, aquellos que se enriquecieron en la pandemia”.

“No proponemos nuevos impuestos, sino modificaciones sin alterar la presión tributaria, de manera que los sujetos pasivos a ser gravados sean otros, que prospere la idea de que pague más quien tiene más”, resumió el asesor.

Contra la LUC y la forma de fijar los precios de los combustibles

Mientras que para el gobierno el nuevo esquema de ajuste de tarifas es un criterio “técnico” y “transparente”, durante su intervención el presidente de Fancap se dedicó a explicar por qué a criterio de los trabajadores esos principios no se sostienen y, en cambio, las razones por las que se cambian los precios siguen un criterio “político”. El nuevo sistema es en función del precio de paridad de importación (PPI)](https://ladiaria.com.uy/economia/articulo/2021/8/los-combustibles-un-debate-circular-el-origen-de-la-formula-de-ppi-lo-que-voto-el-fa-y-la-vuelta-de-la-desmonopolizacion/), un cálculo teórico que realiza la Unidad Reguladora de los Servicios de Energía y Agua (Ursea) que evoluciona en línea con el mercado internacional del crudo y marca una referencia de eficiencia para Ancap.

A los precios actuales, el aumento del crudo es casi el doble en comparación con 2020, pero Rodríguez admitió que el año pasado el precio se había desplomado a raíz de la pandemia y que este año el precio del crudo volvió a valores de 2017 y 2018.

Rodríguez cuestionó lo “técnico y transparente” del mecanismo de PPI porque “podrían haberlo aplicado desde octubre de 2020, cuando el precio internacional se había desplomado, se podrían haber bajado los combustibles. Eso no fue un criterio técnico, fue una definición política, que no está mal, es lo que funciona en todo el mundo, lo que está mal es decir que se establece una regla de criterio técnico y acomodarlo a sus intereses políticos”.

En esta línea el presidente de Fancap aseguró que también podría haberse aplicado a partir del 1º de enero de este año el actual esquema, pero a su entender desde Presidencia priorizaron no modificar el precio hasta que terminara la zafra agropecuaria.

Rodríguez continuó en esta línea y afirmó que “nos venden un mecanismo transparente que lo es muy poco”, ya que después de tres aumentos mensuales consecutivos de los precios de los combustibles, para bajarlo, desde el gobierno se cambió la fecha del período de referencia a fin de mes, de forma de acercar las fechas entre el promedio que hace la Ursea y el momento en que el Poder Ejecutivo fija los precios.

Varios analistas criticaron al gobierno por este cambio porque entienden que se trata de “discrecionalidad política” y así también opinó Rodríguez, quien afirmó que esto se hizo “para acomodar el criterio técnico a sus objetivos políticos”, al igual que pasó con la última decisión de no cambiar el precio del combustible, justificada en el excedente de venta que hizo Ancap a UTE.

Para el sindicalista “este método que instaló el gobierno, todo lo que está plasmado en la LUC, no es un criterio técnico que se utilice a rajatabla y tampoco es transparente, y demuestra, por el precio de los combustibles, que la propuesta para bajarlos fracasó”.

Primeras respuestas desde Ancap

Previo a la conferencia, el presidente de Ancap, Alejandro Stipanicic, en los festejos por los 90 años de la empresa estatal, había adelantado a la prensa que si la propuesta del sindicato se trataba de una quita de impuestos, el diálogo no iba a tener que ser con la institución, sino directamente con el Poder Ejecutivo, porque “no es algo que le competa a Ancap, es un tema que tiene que manejar el sindicato en otros ámbitos”, dijo en declaraciones recogidas por la radio Universal.

Otra de las propuestas que el sindicato había hecho para mantener el negocio del pórtland fue crear una ley por la que todas las obras públicas deban usar al menos parte de pórtland nacional; sin embargo, para Stipanicic eso “no parece que cambie la situación de Ancap, que ya tiene 50% de la obra pública, no cambia en nada; necesitamos una sustentabilidad en la demanda que ni siquiera la obra pública puede sostener”. Afirmó que el “derrame negativo” que provoca la industria nacional de pórtland en la economía uruguaya es “tan significativo como el de los combustibles”.

Con respecto a esta área de negocios para Ancap, el presidente aseguró que seguirán por la línea de asociarse con privados y adelantó que en los próximos días habrá anuncios sobre avances en las negociaciones, que ya estarían por ingresar a una fase técnica.

El vicepresidente de Ancap, Diego Durand, también se refirió previo a la conferencia al precio de los combustibles y en diálogo con la prensa apuntó que “Ancap ya no define los precios de los combustibles, lo que tenemos que hacer es que Ancap sea lo más eficiente posible, optimizarla, apuntar a futuro, a nuevas tecnologías; ese es nuestro camino: optimizar la empresa, donde hay derroches ya no va más, y pedirle plata a la gente tampoco; tiene que ser eficiente con lo que tiene y tenemos material para hacerlo”.