Campeonato Uruguayo: este es el calendario de partidos amistosos de verano

Los planteles de Primera División aún están de vacaciones. Será en la semana que inicia 2023 que cada uno vaya volviendo a sus actividades. Lejos de la cancha, lo que ya se empezó a mover es el período de fichajes. Es lógico: muchos contratos caen el 31 de diciembre, hay jugadores que renovarán, pero hay otro montón que no lo harán, por lo que cada equipo deberá rearmar su historia para la temporada que empezará en febrero.

Lo otro que ya se armó y se mira de reojo mientras los jugadores descansan es la grilla de partidos que servirán de preparación. En ese sentido, enero estará cargado de fútbol que se jugará mayoritariamente en Montevideo y Maldonado. El clásico de verano ya está pactado, pero tendrá su incidencia en los aprontes de pretemporada la novel y múltiple competencia denominada Serie Río de la Plata, que se jugará por segunda vez y que no sustituye a la Copa Río de la Plata, un torneo amistoso jugado diez veces.

Primero, lo primero

El domingo 29 de enero se definirá la Supercopa Uruguaya, choque que tendrá frente a frente a Nacional (campeón uruguayo y del Intermedio) y a Liverpool (vicecampeón en ambos torneos), partido único que se jugará en el estadio Centenario.

Si quitamos ese partido del medio, tomando en cuenta que los clubes arrancarán sus prácticas en la semana del 3 de enero y que el Torneo Apertura comenzará el 4 de febrero, será un mes de pretemporadas.

Con el torneo doméstico cruzado por la competencia internacional, quien va a tener que apurar los motores será Boston River. El sastre, históricamente clasificado a la Copa Libertadores, deberá jugar su llave por la fase 1, ida y vuelta ante el Zamora venezolano, entre el 7 y el 16 de febrero. Si Boston pasa ese cruce, a la semana siguiente comenzará el mano a mano ante Huracán de Argentina.

Precisamente a esas alturas, o sea a partir del 22 de febrero, será Deportivo Maldonado quien salga a escena para definir ante el Fortaleza de Brasil su instancia en la segunda fase. Si gana el mano a mano, en la tercera fase jugará ante el ganador de Cerro Porteño de Paraguay y Curicó Unido de Chile. Para acceder a la fase de grupos deberá imponerse en ese choque también.

Nacional y Liverpool, que van directo a los grupos de la Libertadores, tendrán más espacio para aprontar ese compromiso, porque debutarán, con suerte, a finales de marzo. En el medio, claro, deberán arrancar con buen pie el Apertura local.

Los de la Copa Sudamericana ya se saben su historia cercana: Defensor Sporting se las verá con Danubio, mientras que River Plate hará lo propio con Peñarol. Ambos cruces serán a partido único, por lo que si no hay ganador en los 90 minutos se definirá en alargue o, en su defecto, por penales. Los que ganan sus respectivas llaves entrarán a la fase de grupos.

Dame fútbol

Más allá de que los planteles se vayan definiendo entre lo que se tiene en lista y los que puedan fichar pasando por el mostrador, los partidos de preparación inundarán los días de fútbol.

En 18 días, entre el 8 de enero y el 25 del mismo mes se habrá de jugar 23 partidos, en sólo seis de los cuales habrá choques entre uruguayos. Se jugará en siete estadios montevideanos (Centenario, Parque Central, Campeón del Siglo, Belvedere, Franzini, Saroldi y Viera), y en uno fernandino, el Campus de Maldonado, que recibirá cinco encuentros y será el que tenga clubes de más nacionalidades (de Uruguay, Argentina, Perú y Ecuador)

Montevideo y Maldonado se repartirán las contiendas, atractivo estival para quienes estén ansiosos de fútbol, teniendo en cuenta que la temporada pasada terminó en noviembre por el Mundial de Qatar.

Habrá de todo como en botica. A priori, como manda la historia, lo más atractivo será el clásico entre Nacional y Peñarol, partido que se jugará el 23 de enero en el Centenario. Más allá de ese enfrentamiento puntual, ambos equipos tendrán antes tres partidos por su cuenta (ver recuadro). No son menores: cómo se llega al clásico y, consecuencia mediante, cuál es el resultado ante el tradicional rival; en los últimos años se han cuestionado entrenadores por esas razones.

Los equipos extranjeros que vienen a jugar atraen. Los argentinos, siempre; en esta ocasión, en especial, llaman la atención San Lorenzo y Estudiantes de La Plata, equipos que usarán las copas en Uruguay para aprontar sus participaciones en la Sudamericana.

En ese tren también estará Universidad César Vallejo de Perú, equipo que será comandado por Sebastián Abreu. El Loco debutará al mando de los trujillanos esta temporada, en la que tendrá que afrontar la Sudamericana ante Deportivo Binacional.

Otro de los buenos es Independiente del Valle. Los ecuatorianos, actuales monarcas de la Sudamericana, dirán presente para ajustar detalles de cara a la Copa Libertadores, a la que accedieron precisamente por haber ganado la Sudamericana 2022.

Caras nuevas, otras conocidas

Se habla de jugadores, claro. Son la sal del juego, lo que lo hace trascendente. Cada mercado de pases es un remate en el que unos van y otros vienen, algunos equipos se refuerzan como ninguno y otros sufren sangrías de buena parte de su plantilla. Pero de lo que poco se habla, al menos cuando no hay fútbol -porque a la luz de los resultados los primeros que se van a la calle son ellos- es de los entrenadores (ver recuadro).

Ya no asusta: sólo seis directores técnicos mantuvieron el cargo con respecto a la temporada que terminó. Cuatro son de primera y dos de ellos vienen desde la B: Julio Fuentes, histórico tras ascender a La Luz, y Danielo Núñez, que subió con Cerro -aunque antes había estado en la A con su Cerro Largo-.

Pocas veces se da, pero esta fue una: el campeón cambió de director técnico. Pablo Repetto dejó Nacional tras ser el mejor del Uruguayo 2022, argumentando que volver a Ecuador, donde reside, era una cuestión importante para él, sobre todo para estar al lado de su familia. Quien lo sustituirá es el argentino Ricardo Zielinski.

En la vereda de enfrente se sabía que el cambio de entrenador se imponía tras un año malo en cuanto a resultados y logros. Peñarol ya piensa en lo que viene, que será de la mano de Alfredo Arias.

Entre las caras nuevas hay varios que ya actuaron la temporada pasada y que ahora estarán al mando de otro club. El caso más claro es el de Ignacio Ithurralde, quien hizo un gran año con Boston River, clasificándolo a la Libertadores, pero ahora tomará el mando de Montevideo City Torque.

Quien volverá a dirigir un club uruguayo después de mucho tiempo es Fabián Coito. Conocido por su trayectoria al frente de las selecciones juveniles de Uruguay desde 2007 hasta 2017 -buena parte de la era Tabárez-, y que luego dirigió la selección absoluta de Honduras, volverá a las canchas de nuestro fútbol para estar al frente de Deportivo Maldonado, que ya no tiene al bueno de Francisco Palladino, quien se fue a dirigir a Chile. Coito, como puntapié inicial a su carrera de entrenador, hace 18 años dirigió a Central Español en 2004.