El presupuesto sigue siendo la gran preocupación de los trabajadores incluso antes de que la discusión llegue al Parlamento en setiembre. Para la Asociación de Funcionarios de UTU (AFUTU), “hay que discutir los criterios de recorte presupuestal, que en UTU están caracterizados por el recorte de los cursos”, dijo a la diaria el secretario general Nelson Jaurena. Por eso, convocan a un paro de 24 horas el miércoles 26 para tener en cada centro distintas asambleas donde discutir el escenario que plantea el preplanillado de horas para 2021.
Además, en Montevideo los docentes ocuparán las escuelas Pedro Figari y de Artes Gráficas, que es el lugar donde las autoridades se reúnen para hacer el planillado. “Es el momento en que la UTU decide los grupos que se van a abrir el año que viene, y hasta el momento el criterio para la apertura es el cierre de los trayectos I de la formación profesional básica (FPB), sin haber hecho ningún tipo de consulta en los ámbitos que corresponde”, detalló Jaurena.
El FPB es un programa de UTU que permite acreditar el ciclo básico mediante una formación profesional. Para eso combina materias del ciclo básico tecnológico (CBT) de UTU con una importante cantidad de horas de taller en distintas orientaciones. Originalmente se pensó para mayores de 15 años que hubieran pasado por otras experiencias de educación media y las hubieran abandonado, pero desde 2017 se eliminó el mínimo de edad para que los estudiantes que salieran de primaria pudieran inscribirse directamente a un curso de FPB.
Según dijo a la diaria el director general del Consejo de Educación Técnico Profesional (CETP), Juan Pereyra, hay una recomendación a los directores de instituto de inscribir a los niños que egresan de la escuela en CBT en vez del FPB; a eso se debe la disminución de grupos de trayecto I de FPB, que equivale al primer año. Además, en su momento Pereyra adelantó que el CETP piensa una reestructuración del programa para 2022.
Pereyra sostuvo que el principal argumento para reformular el FPB es el bajo desempeño que tuvo en comparación con otras modalidades de ciclo básico en el último estudio del Instituto Nacional de Evaluación Educativa. Sin embargo, docentes de distintos centros de FPB comenzaron a juntarse para defender la modalidad y aseguran que “hay resultados que no se ven en las estadísticas”, en relación a la retención de estudiantes que ya han abandonado otras modalidades del sistema formal.
Jaurena considera que esta decisión de UTU “significa la pérdida en la oferta educativa para gurises que son mayoritariamente desertores del sistema educativo y ven en el FPB la posibilidad de dar continuidad a sus estudios”. Además, trae consigo como consecuencia en el mediano plazo “el cierre en el correr de dos o tres años de esta opción para estudiantes que lo necesitan”. Desde AFUTU evalúan “como muy negativa esta decisión y el hecho de que se haya tomado sin consultar, cuando hay un correlato en una pérdida muy grande de horas docentes”.
¿Para quién es el FPB?
La discusión gira en torno a los niños de 12 años que egresan de la escuela y pueden optar por el CBT o por el FPB. Sobre este punto Jaurena comentó que “en determinado momento el sindicato estuvo en desacuerdo con que se baje tanto la edad de ingreso al FPB, pero ahora que el programa está instalado, cualquier cambio debería, por lo menos, ser parte de un proceso de evaluación, porque capaz que los chiquilines que se inscriben con 12 años al FPB precisan o necesitan de la contención especial que se les brinda, algo que no sucede de ninguna manera en el CBT”.
Para el representante sindical lo importante es que “exista la posibilidad de optar; si se cierran grupos de FPB no hay opción: los chiquilines van directamente al CBT y tendríamos que esperar a que haya un desertor ahí para que pueda tener la contención que brinda el FPB. Estamos abiertos a discutir cualquier tipo de reformulación o mejora que se quiera hacer, pero no es primero cerrando y después evaluando, sino que primero hay que hacer una evaluación y después ver qué corregimos en función del análisis que se haga”.
El objetivo de la ocupación del miércoles en el centro donde se reúnen a hacer el planillado es poder presentar el punto de vista del sindicato. Por lo general, el proceso de armar los grupos para el año siguiente cuenta con la participación de AFUTU, por lo que Jaurena cree que “hay margen” para la conversación.
Se planifican 19 paros en la próxima etapa
Jaurena adelantó que en la dirección nacional de AFUTU se proyectan 19 paros, uno por departamento. La agenda aún no está definida, pero el objetivo es que se pueda hacer asambleas en todos los centros para “discutir estos criterios de recorte presupuestal y lo que emanó del convenio superior de salario, ya que el gobierno nos está proponiendo perder desde el punto de vista salarial, los trabajadores perdemos en el poder de compra”, detalló el sindicalista.