Desde mediados de setiembre, cuatro maestras adscriptoras del jardín de infantes 283, de Paso Carrasco, en Canelones, dejaron de atender a ocho estudiantes de cuarto año de la carrera Maestro de Primera Infancia (MPI) porque desde junio no han recibido pagos por parte de la Dirección General de Educación Inicial y Primaria (DGEIP).

Las alumnas se encuentran en conflicto y tienen previsto hacer una intervención este jueves al mediodía en la sede de Primaria para reclamar los haberes adeudados de sus docentes adscriptoras. Esther Lemos, delegada de la filial canaria de la Asociación de Maestras del Uruguay (Ademu), señaló a la diaria que apenas el sindicato tomó conocimiento decidió hacer un seguimiento de los “problemas” que tenían las alumnas en su último año de carrera, que culmina el 30 de octubre, en el que tienen que presentar una monografía y la tesis de grado.

En ese sentido, este miércoles de mañana, desde Ademu mantuvieron una conversación con la inspectora departamental de Inicial y Primaria, Elsa Irigoyen, para saber por qué desde junio no se les había pagado la labor a las docentes. La respuesta fue que el trámite está “trancado” en la sección de Primaria, Regularización de Trámite, y depende de la firma de la directora general, Graciela Fabeyro.

“Lo que nos deja ver esto y lo que nosotros queremos reclamar es la falta de comunicación a la interna del sistema, porque la Inspección General de Inicial, que tiene que dar el aval desde el punto de vista pedagógico para habilitar ese jardín, no tiene la comunicación tan fluida como con la DGEIP, que es la que firma todo esto y es la que hace que el pago salga”, criticó Lemos.

En ese sentido, la delegada de Ademu sostuvo que se trata de un problema de administración, porque la directora general “es una sola”. Fabeyro, dijo, “tiene todo esto para resolver, y eso hace que se burocratice mucho más y se le traspapele” el expediente que debe firmar. “Esto denota claramente el funcionamiento de una dirección general respecto de un consejo [como era antes de la promulgación de la ley de urgente consideración], porque demuestra las irregularidades que pueden llegar a pasar y, además, la centralización de la educación”, agregó.

Asimismo, Lemos dijo que “este sistema está dejando a estudiantes” a casi 20 días de recibirse con una práctica que “ya viene diezmada” por la pandemia, porque la práctica el año pasado fue “bastante irregular”. “Están dejando, a 20 días de su examen final, las cosas truncadas para ocho estudiantes”, fustigó. La delegada de la filial de Canelones de Ademu aseguró que “si hoy está la firma”, este jueves “las chiquilinas vuelven al jardín de nuevo”.

Por su parte, Yurema Bleda, estudiante de MPI y practicante en el jardín de infantes 283, dijo a la diaria que “ya movieron todas las cartas posibles”, pero que por el momento no tuvieron respuesta desde la DGEIP. “Nosotras vamos a terminar las prácticas el 30 de octubre y dependemos de ellos para recibirnos y presentar la monografía y tesis final para defender en noviembre. Estamos desesperadas”, expresó. Bleda sostuvo que, tal como planteó Lemos, si este miércoles Fabeyro firma para que se les pague el adeudo a sus docentes, el jueves vuelven a la práctica y descartan la movilización que tenían planeada para las 13.00 en la sede de la DGEIP (Juan Carlos Gómez 1314).

En agosto, estudiantes de Magisterio y maestras de Montevideo habían parado durante semanas porque se les adeudaba dinero a maestras adscriptoras.

En ese momento, la representante docente en el Consejo de Formación en Educación, Rosana Cortazzo, había dicho a la diaria que habían tenido “muchísimos problemas con la práctica docente y con el vínculo” con Primaria. “Desde marzo se ha tenido problemas porque Primaria entiende que no puede pagar la plata que paga en practicantes, algo tan terrible como eso”, apuntó.