Al igual que todos los años, la Dirección General de Educación Secundaria (DGES) publicó los principales datos de matrícula y de resultados educativos registrados en su Monitor Educativo. Como informó semanas atrás la diaria, los datos marcan que la repetición bajó en ciclo básico, grados en los que el año pasado se aplicó la Transformación Curricular, y aumentó en bachillerato, donde rigió en Plan Reformulación 2006.

En la presentación, encabezada por la titular de la DGES, Jenifer Cherro, y por la presidenta de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), Virginia Cáceres, se dio más detalle acerca de la promoción de los estudiantes. Si bien en 2020, 2021 y 2022 se aplicaron distintas flexibilizaciones al reglamento de pasaje de grado y el año pasado comenzó a aplicarse el Plan de Educación Básica Integrada (EBI) en primero, segundo y tercero de liceo -ahora séptimo, octavo y noveno-, los datos presentados por la DGES apuntaron a la comparación con 2019.

Cherro reivindicó la Transformación Curricular y reclamó que se convierta en una política de Estado y, por el otro, se comparó con el gobierno anterior. Según dijo, con la aplicación de los cambios curriculares en todos los grados de la educación obligatoria, lo que ocurrirá el año que viene, la actual administración dejará “la casa en orden”, y se mostró contenta con los resultados de aprobación, egreso y desvinculación en comparación con 2019, más allá de que en algunos casos empeoraron con relación a 2022.

La aprobación general en ciclo básico, donde el año pasado comenzó a aplicarse la EBI, fue de 89,8%, cifra más alta de la que se tienen registros. Al respecto, debe tenerse en cuenta que el nuevo reglamento de pasaje de grado para ese tramo eliminó la repetición en séptimo grado y que los estudiantes únicamente deberán recursar el nivel si tienen un fallo de desvinculación. Además, en los restantes grados se eliminaron los exámenes y se dispone que el estudiante que no obtiene un nivel de aprobación en una asignatura sea derivado a un espacio de acompañamiento en diciembre y, de ser necesario, a otro en febrero.

Según explicaron Leticia Marziotte y Juan Manuel Sosa, dos de sus integrantes, el Departamento de Estadística de la DGES calculó que sólo 2,2% de los estudiantes de séptimo grado promovieron con más de tres asignaturas sin aprobar y, por lo tanto, hubieran repetido en el plan anterior. Además, a ellos debe sumarse 8,2% de estudiantes que se desvincularon durante el año en ese grado, porcentaje que fue de 7,8% en octavo grado y de 9,5% en noveno.

Precisamente, la Transformación Curricular permite mostrar con mayor certeza cuando un estudiante se desvincula del centro educativo durante el año, ya que el indicador que se medía hasta ahora era el de la desvinculación interanual, que sólo contabiliza a los estudiantes que dejaron de anotarse en un centro educativo de un año a otro. La desvinculación interanual bajó y en ciclo básico se ubicó en 3,6%, un punto porcentual menos que en 2019.

En bachillerato, donde rige el plan anterior a la Transformación Curricular, aumentó la repetición

Por su parte, en cuarto, quinto y sexto de liceo, grados en los que no se aplicó la reforma, la tendencia fue otra. Por ejemplo, en cuarto grado los estudiantes promovidos el año pasado fueron el 70,7%, mismo valor que en 2019; por su parte, en 2022 el porcentaje había sido 74,2%. En quinto grado 78,5% de los estudiantes pasaron de grado, dos puntos y medio más que en 2019, pero tres puntos menos que en 2022. Mientras tanto, en sexto grado la promoción fue de 80,2%, más de cinco puntos porcentuales menos que el año anterior.

No obstante, la promoción de sexto grado, para la que alcanza con tener menos de tres materias sin aprobar, no equivale al egreso de la educación media, para lo que se requiere no tener ninguna asignatura pendiente. Según los datos cerrados en abril de este año, sólo 56,4% de los estudiantes que cursó sexto grado egresó del liceo el año pasado, cuatro puntos porcentuales menos que en 2022; sin embargo, el indicador se ubicó seis puntos por encima de lo que marcó en 2019, lo que fue especialmente destacado por Cherro.

En la presentación también se mostraron los datos de egreso de la educación privada, que en 2023 se ubicó en 86,7%, un punto más que el año anterior.

Si bien el indicador también fue a la baja, la desvinculación interanual en bachillerato es sensiblemente mayor a la de ciclo básico. En promedio, 10,7% de los estudiantes de educación media superior dejaron de registrar una inscripción en un centro educativo en 2024, medio punto porcentual menos que un año antes.

Una novedad del Monitor Educativo para este año fue que se relevaron y se publicaron datos de inasistencias de los estudiantes en liceos públicos. El promedio de inasistencias anuales en ciclo básico fue de 32,2 el año pasado, cuando en 2022 había sido 30,4 y en 2019 de 27,1 faltas. Marziotte y Sosa mostraron que el dato es especialmente preocupante en el primer año de la educación media, donde tanto en 2022 como en 2023 se registró un promedio de 35,9 faltas en el año, cuando antes de la pandemia era de 26,2 faltas.

A su turno, Cáceres reivindicó los datos de promoción y desvinculación en EBI y los asoció a distintas medidas tomadas desde la ANEP. En particular, destacó el rol que jugaron los distintos espacios de acompañamiento y tutorías, y marcó que “ese es el camino” a seguir. Al respecto, dijo que este año se comenzó a aplicar también un programa para los estudiantes de bachillerato, que las autoridades esperan que pueda mejorar los números de egreso. Según la jerarca, “la Transformación Educativa está dando sus primeros pasos y son positivos”.

Bajó matrícula de Secundaria y aumentó porcentaje de estudiantes en liceos privados

La matrícula total de secundaria, tanto en liceos públicos como privados, es de 259.785 estudiantes, 12.500 menos que en 2017. Dicha cifra representa 75,8% del total de estudiantes de la educación media, y el restante 24,2% concurre a UTU. No obstante, si se observan sólo los centros públicos, a los que asisten 299.255, estudiantes, Secundaria tiene 72,6% de la matrícula y UTU 27,4%. En tanto, de quienes cursan la EBI, 81,3% lo hace en liceos y 18,7% en escuelas técnicas.

A la interna de Secundaria, la proporción de estudiantes que concurren a colegios privados aumentó en los últimos años: el sector privado pasó de representar 14,9% de la matrícula en 2020 a 16,4% en 2024. En Montevideo 28,9% asiste a un liceo privado y en el interior sólo 8,7%. En tanto, en los liceos públicos 171.116 estudiantes cursan planes para adolescentes, mientras que 46.066 cursan alguno de los planes para jóvenes y adultos.

Otro dato que fue presentado por el monitor es que se da una feminización de la matrícula a medida que se avanza de grado. Mientras que en el primer grado de las propuestas para adolescentes la proporción es casi 50 y 50 entre varones y mujeres, el sexto grado termina con 58,5% de mujeres y 41,5% de varones.