Desde que se imputó al exjefe de seguridad presidencial Alejandro Astesiano por tres delitos relacionados con la falsificación de documentos este martes, no han dejado de aparecer nuevas aristas del caso que investiga la fiscal Gabriela Fossati. Una de los últimas líneas de investigación apunta a que el hombre de confianza del presidente Luis Lacalle Pou podría haber cometido un cuarto delito: lavado de activos.

Esto parte del hecho de que Astesiano tiene varias propiedades en su haber, aunque no estaban a su nombre, sino que la titularidad era de testaferros. Según supo El Observador con base en fuentes de la investigación, se trataría de algunos apartamentos y de un club nocturno y una empresa de seguridad, entre otras empresas. Fossati deberá investigar si el origen del dinero con el que pagó esos bienes proviene de la actividad ilícita en la que participaba.

Hasta ahora la fiscal imputó con prisión a Astesiano y tres personas más por los delitos de suposición de estado civil, asociación para delinquir y tráfico de influencias. Los cuatro conformaron una organización delictiva que falsificaba documentación para permitir a ciudadanos rusos sacar la cédula y el pasaporte uruguayo. Se sabe que actuaban al menos desde agosto del año pasado y que muchas de las reuniones que mantenían se hacían en la oficina de Astesiano, en el piso cuatro de la Torre Ejecutiva.

Buena parte de la atención que recibe este caso responde a que en un primer momento se aseguró que Astesiano no tenía antecedentes penales, sino más de 20 anotaciones relacionadas a distintos delitos, pero este miércoles la diaria informó que el excustodio fue procesado con prisión por estafa en 2013, en la cárcel de Las Rosas, en Maldonado, y que luego fue condenado a 18 meses de prisión en setiembre de 2014.

Que se diera a conocer esta condena provocó una investigación de urgencia sobre el área de Policía Científica, que es la que emite los legajos, porque en 2020 y en 2021 estos antecedentes no aparecían en el historial de Astesiano.

Además de la “sorpresa” que generó la adulteración de los antecedentes de Astesiano, este jueves MVD Noticias informó que el exjefe de seguridad presidencial también figura como deudor grado 5 en el Banco República, que significa, en la clasificación que hace el Banco Central del Uruguay, que es “irrecuperable”.

Esta calificación implica que la entidad bancaria encuentra evidencia de “incobrabilidad”, en una deuda que tiene atrasos mayores a 180 días en los pagos y de más de 120 días en la presentación de información.