Tras ser imputado por más de 20 delitos sexuales contra niños y adolescentes, el exsenador Gustavo Penadés fue trasladado a la Unidad 19 Florida, una de las cárceles en mejores condiciones del sistema carcelario, donde además está preso Alejandro Astesiano, exjefe de la custodia presidencial. En esta unidad se alojan tanto personas formalizadas como condenadas, como es el caso de Penadés y Astesiano, que están en distinta situación procesal y comparten unidad.
Sobre las condiciones de reclusión, el ministro del Interior, Luis Alberto Heber, dijo que Penadés “es un preso común” que está “como cualquier persona”, porque “acá no hay privilegios”. Según pudo saber la diaria, Penadés ya pudo comprarse un colchón pero se le negó el ingreso de otros electrodomésticos propios que pretendía tener para su uso personal, ya que las instalaciones que hay en la cárcel son de uso colectivo.
Como tiene una cardiopatía y diabetes, Penadés intentó eludir la cárcel planteando que por razones de salud no podía estar preso. Sin embargo, el Instituto Técnico Forense determinó mediante una pericia que sus problemas de salud son compatibles con la privación de libertad, donde puede continuar con su tratamiento.
Este sábado, tras la renuncia de su defensa, encabezada por su exasesor Javier Vega, Penadés fue trasladado en un móvil del Instituto Nacional de Rehabilitación (INR) con carcelaje al juzgado de Florida, donde designó a su nueva defensoría. El exsenador resolvió recurrir a la defensa pública, por lo que será defendido por un abogado de oficio. Penadés bajó del móvil del INR y se retiró de él esposado.