Alejandro Astesiano, el exjefe de Seguridad de Presidencia, estaba cómodo con las tareas que tenía en la Torre Ejecutiva y las hacía sin vacilar. Así se desprende del interrogatorio que tuvo con la fiscal que lleva su causa, Gabriela Fossati, en el que reconoció que recibía “muchos pedidos de favores” y los realizaba “sin cuestionarse” si las tareas estaban por fuera de sus funciones.

“El mismo presidente me daba alas para hacer los trámites que yo tenía que hacer. Tenía pedidos de él para que buscara información sobre el homicidio de una señora uruguaya en el lado brasileño de la Barra del Chuy, las rapiñas a una carnicería del barrio Cerrito y el abuso sexual a una menor en una fiesta de jóvenes del Partido Nacional”, expresó Astesiano, según las declaraciones que recoge este viernes El País sobre una audiencia que tuvo el excustodio en Fiscalía el 12 de diciembre.

De todas formas, aclaró que “el presidente no me decía 'hacé esto' o 'esto otro no lo hagas'. Soy yo que capaz me tomé atribuciones por pedidos de ellos [integrantes del gobierno] que me abrieron la cancha”.

Astesiano también declaró en aquella oportunidad sobre tareas de índole administrativa que llegaban a sus manos. Por ejemplo, era el encargado de revisar los pases en comisión de policías, los estudiaba y daba su punto de vista, luego de que se los entregara el secretario privado del prosecretario de Presidencia, Rodrigo Ferrés, quien también fue interrogado por la fiscal.

De hecho, al hablar sobre este tema contradijo directamente al secretario de Presidencia, Álvaro Delgado: “Muchos documentos me enviaban de la secretaria de Ferrés. Me los mandaban para ver si yo estaba de acuerdo. Yo era un jefe político, por más que Delgado diga otra cosa”, afirmó.

De este modo se refería a que Delgado había minimizado el rol de Astesiano en el Poder Ejecutivo: “Estamos hablando de un custodio que en realidad traicionó la confianza del presidente de la República; tenía una cosa paralela, oscura, a partir de un tema de pasaportes que la Justicia empezó a investigar y resulta que la mayoría vienen de los gobiernos anteriores del Frente Amplio, desde 2013 a la fecha”, había declarado Delgado, algo sobre lo que insistió este martes, cuando en entrevista con la radio Sarandí remarcó que “acá no estamos hablando de vicepresidentes ni de directores de entes”, sino de “un custodio”.

¿Qué dice Astesiano sobre Berriel?

También en la audiencia de diciembre Astesiano habló del exsubdirector de la Policía Jorge Berriel, quien se espera que sea imputado este viernes. Aseguró que tenía una relación de trabajo y que a través de él canalizaba los pedidos de favores que le llegaban de distintos lados. El excustodio dijo que en la Torre Ejecutiva “siempre se supo” que él “tenía mucha vinculación con Berriel. El presidente sabía que yo hablaba con Berriel”.

En esa audiencia se puso sobre la mesa un audio en el que Astesiano le adelantaba a Berriel que iba a ser nombrado subdirector y, al ser consultado sobre si tenía autorización a manejar esa información por adelantado, Astesiano respondió que lo habló por la amistad que tenían y aclaró que no era un dato reservado: “A veces nos enterábamos de cosas antes que el Ministerio del Interior”, subrayó.

La fiscal consultó si le había solicitado a Berriel información del Sistema General de Seguridad Pública. Astesiano afirmó que nunca pidió los partes policiales, pero reconoció que los policías le enviaban esos documentos reservados porque así se evitaban escribir, según consigna El País.

En relación a los favores que hacía vinculados a las fuerzas de seguridad, Astesiano dijo: “Me llegaban muchísimos pedidos. Muchos se tramitaban. Otros quedaban en el camino”.

  • El caso Astesiano: seguí una a una las principales conversaciones que mantenía el excustodio, que ahora están siendo investigadas.