Gustavo Leal, exjerarca del Ministerio del Interior, fue a Brasil a conversar con el padre de Alejandro Astesiano. Por ese motivo fue llamado a declarar como testigo por parte de la fiscal del caso, Gabriela Fossati; sin embargo, tras menos de media hora de audiencia, Leal salió de la Fiscalía como imputado en la causa. Este jueves el exfiscal de Corte Jorge Díaz brindó su opinión sobre este procedimiento y aseguró que este rápido pasaje de testigo a indagado no debería haberse dado.

“Las conductas con apariencia delictiva cometidas en el extranjero en principio están fuera de la competencia de la Justicia uruguaya, excepto algunas excepciones que en este caso no se me ocurre cuáles serían; en principio general, lo que pasa en el extranjero tiene que ser juzgado en el extranjero”, dijo sobre esta situación Díaz, en diálogo con Nada que perder.

A eso le sumó que aparentemente falta información al indagado, porque su abogado, Diego Camaño, tuvo que presentar un escrito para conocer qué hechos de apariencia delictiva implicaron el cambio de su cliente. “Legalmente uno siempre tiene la obligación de decir por qué está indagado; acá no sé qué pasó, pero aparentemente Leal no sabe por qué pasó a condición de indagado y la tarea del abogado es pedir que le explique”, dijo Díaz.

En particular sobre este cambio de testigo a indagado, el exfiscal de Corte señaló que tiene una diferencia con algunas opiniones académicas que han planteado que este pasaje es simple. “Yo digo que la respuesta es no; si una persona es citada a declarar sobre equis hechos y es citada en calidad de testigo, una vez que declara como testigo no puede luego ser indagada por esos hechos”, sostuvo.

A su entender, esta práctica vulnera derechos y es una “conducta vieja, resabio del sistema anterior”. “Pasa lo que pasaba antes, en el sistema anterior, que era que te cito como testigo, que tenés la obligación de ir a declarar, la obligación de decir la verdad, no tenés abogado y no conocés la carpeta de investigación de la Fiscalía, y después te dejo como indagado”, explicó.

Díaz recordó que “cuando vas como imputado si querés no vas, si te llevan podés decir: ‘no declaro’, sí o sí [hay que ir] con abogado, tengo acceso a la carpeta de investigación. Las diferencias son notables. En el sistema antiguo te citaban como testigo y después de que declarabas te decían: ‘Bueno, ahora lo voy a imputar por los hechos que admitió como testigo’. Era una estafa de etiquetas, una vulneración brutal de derechos”.

“Si la fiscal entiende que algo de lo que hizo [Leal] puede ser sospechoso, debería haberlo llamado a declarar como indagado desde el primer minuto. Si efectivamente yo sospecho o intuyo que hay hechos con apariencia delictiva, al minuto uno con abogado y presentando la carpeta de investigación”, opinó Díaz, y enfatizó: “Son tan notables las diferencias entre uno y otro; él podría no haber ido, porque tiene derecho a guardar silencio”.

De todas formas, matizó al decir que “se puede dar esa hipótesis de pasar de testigo a imputado solamente si durante el testimonio del testigo afirma hechos que no estaban en discusión en ese momento o no estaban siendo investigados. Supóngase que la persona que va como testigo dice: ‘Fui yo que lo maté’ y estábamos investigando si había visto el homicidio; bueno ahí sí hay un corte y un paso. Pero esos hechos tan claros no son comunes”, advirtió.

Díaz tampoco encontró explicación para el hecho de que sea la división Asuntos Internos del Ministerio Interior la que esté investigando este episodio, ya que se trata de personas civiles: Leal y la familia de Astesiano. Aseguró que es una práctica común entre los fiscales pedir que ciertas dependencias, con las que trabaja con más confianza, asuman el papel, pero no sabe si este fue el caso.

Asimismo, aseguró que tampoco hay obligación por parte de Fossati de informarle al fiscal de Corte Juan Gómez de los pasos a seguir en su investigación, pero recordó que es una práctica que se estila en los casos más mediáticos, aunque también recordó que cuando él ocupaba el cargo llegó a enterarse de importantes decisiones de los fiscales a través de la prensa.

Para Díaz, fue “un chascarrillo” que lo hayan hecho ir a declarar

Días atrás, el exfiscal de Corte también tuvo que ir a declarar como testigo en la causa Astesiano, ya que en uno de los chats se mencionaba su nombre en relación a un caso antiguo en el que actuó como juez. Al respecto, Díaz apuntó que “hasta el día de hoy no sé por qué fui citado, porque había dos personas que en un chat decían una cosa”.

“No sé para qué; fue una especie de chascarrillo, pero ta. No se puede investigar el caso porque está en otra fiscalía, no tenía mucho sentido, yo qué sé, no importa, pero en mi opinión no tiene ningún sentido que me citaran, pero a veces el desfile mediático lleva a la tentación de hacer determinadas cosas”, opinó Díaz.

Respecto de la presión mediática que puede sentir Fossati en estos momentos, Díaz comentó: “Un fiscal que no tenga espalda para soportar las presiones mediáticas tiene que pensar en dedicarse a otra cosa, lo mismo un juez; no está bueno, pero pasa, y pasa a veces sin voluntad de presionar”.