Gonzalo Larrosa renunció al cargo de jefe de Policía de Flores, confirmó el Ministerio del Interior a la diaria. La renuncia se da en el marco de la investigación de las visitas conyugales del narcotraficante mexicano Gerardo González Valencia a Cárcel Central. Entonces, Larrosa era el director del Instituto de Rehabilitación (INR), quien estaba a cargo de la gestión carcelaria de este narco.
Las visitas conyugales de González Valencia fueron autorizadas un año antes de que el narcotraficante Rocco Morabito fuera detenido. Por orden del exdirector del INR y hasta ahora jefe de Policía de Flores, el mexicano fue recluido en la sede de la Guardia Republicana y la gestión se mantuvo a cargo de Cárcel Central. En este marco, mediante orden judicial de la jueza Beatriz Larrieu, se autorizó que tenga visitas conyugales.
El INR definió que las visitas fueran en su unidad de origen: Cárcel Central. Un año y medio después, Morabito llegó a esa unidad y se presume que en el marco de esas visitas se encontraron al menos dos veces. En las visitas, la Guardia Republicana se encargaba de los traslados hasta la puerta de Cárcel Central. Una vez dentro, la gestión del preso y sus movimientos dependían del INR.
En un comunicado emitido por la cartera, se indicó que “el ministro del Interior, Luis Alberto Heber, aceptó la renuncia presentada por el Comisario General Gonzalo Larrosa como encargado de Despacho de la Jefatura de Policía de Flores, agradeciéndole los servicios prestados”. Y explicó que “la renuncia del Comisario General Larrosa está motivada para no interferir en una investigación administrativa que se encuentra en curso en el Ministerio vinculada a chats que el entonces Director del INR recibió entre marzo de 2017 y noviembre de 2018 por parte de personas ajenas a esta Secretaría de Estado”. En el comunicado consignaron que la Jefatura de Policía de Flores le fue encargada temporalmente al subjefe de Policía, comisario mayor Pablo Vicchi.
La resolución de Larrosa
Cuando González Valencia fue detenido, un año y medio antes que Morabito, fue alojado en el módulo 12 del Comcar, uno de los sectores de máxima seguridad dentro de las cárceles. Se le encontraron celulares y había sospechas de que podría haber alguna situación de corrupción asociada, por lo que Larrosa emitió la resolución 814/018 con la aprobación de las autoridades políticas, en la que planteó que González Valencia pasaría a estar recluido en la sede de la Guardia Republicana por razones de seguridad, mientras la gestión carcelaria continuaría dependiendo del INR.
En la resolución se envía a González Valencia para que lo custodie la Guardia Republicana, pero, administrativamente, el preso dependía de Cárcel Central. Esto quiere decir que toda la gestión carcelaria correspondía a Cárcel Central.
Larrosa enfatiza en este aspecto en dicha resolución, en la que planteó que son “de público conocimiento las características de peligrosidad que rodean” a González Valencia y que “en atención a estas características se deben mantener medidas de seguridad especiales” y “se entendió que el lugar adecuado para el alojamiento” era “dentro de las instalaciones de la Guardia Republicana”. A su vez, se aclara específicamente de quién dependía la gestión de González Valencia en la resolución: “Se entiende necesario establecer claramente de dónde depende administrativamente la persona privada de libertad González Valencia”. Así es que Larrosa “resuelve”: “Poner en conocimiento a las autoridades de la dirección de la Guardia Republicana y del Centro de Ingreso, Diagnóstico y Derivación, que la persona privada de libertad Gerardo González Valencia depende del mencionado centro, siendo su alojamiento en las instalaciones de la Guardia Republicana, únicamente por motivos de seguridad”.
Antecedentes de Larrosa
Larrosa fue cesado el 30 de noviembre de 2018 tras comprobarse que aportó información falsa respecto del homicidio de una persona que cumplía condena en el Penal de Libertad. Informó que el hombre había fallecido “en una riña” entre personas privadas de libertad, pero luego se comprobó que fue asesinado por un impacto de bala de munición menos que letal tras el disparo de un policía que actuó fuera de la norma, a corta distancia y directo al cuerpo. Fue cesado y trasladado a cumplir funciones en el departamento de Salto.
En marzo de 2020 asumió como director del Centro de Comando Unificado, cargo en el que estuvo ocho meses. En noviembre de 2020 asumió como jefe de Policía de Flores, cargo que desempeña actualmente. Sobre los trascendidos que lo involucran en las decisiones asociadas a las visitas conyugales de González Valencia, el ministro del Interior, Luis Alberto Heber, dijo haberle consultado, pero afirmó que Larrosa no le dijo “nada”. “Pregúntenle a él”, respondió ante la prensa.
Por otra parte, en junio de 2021, circuló en video en que se veía a Larrosa junto a su hijo adolescente practicando tiro en el polígono de la Guardia Republicana. El reglamento para polígonos de tiro policiales y civiles prohíbe que los menores de edad practiquen tiro en los polígonos. Al adolescente se le había asignado una instructora de tiro de la Guardia Republicana, que se ve en el video. También se ven las armas y municiones utilizadas. El Ministerio del Interior descartó investigar el caso.
En esta gestión, Larrosa fue ascendido a comisario general, grado máximo de la Policía.