A principios de febrero se conoció la noticia de que la cúpula policial sería relevada por completo. Diego Fernández, director de la Policía Nacional, tuvo que dejar su cargo. También sus subdirectores, ambos involucrados en el caso Alejandro Astesiano. Jorge Berriel, exsubdirector ejecutivo de la Policía, fue imputado, mientras que Héctor Ferreira, exsubdirector administrativo de la Policía, está indagado y presentó su renuncia en diciembre por esta causa.
El ministro del Interior, Luis Alberto Heber, afirmó que los cambios en la cúpula policial son para “consolidar los éxitos” de la gestión, porque “nuestro pueblo precisa más seguridad”, y que “nada tiene que ver” el caso Astesiano. Sin embargo, el presidente de la República, Luis Lacalle Pou, lo contradijo y reconoció que las revelaciones del caso Astesiano fueron “un elemento más”. Son varias las jerarquías indagadas por este caso.
Esta semana asumió la nueva cúpula de la Policía, con José Azambuya a la cabeza. En una ceremonia sin la presencia de los dos exsubdirectores, uno imputado y otro indagado por el caso Astesiano, el director de la Policía Nacional, Diego Fernández, dejó su cargo.
En este marco, se adelantó que podría haber otros movimientos entre las jerarquías de la Policía. Fuentes del Ministerio del Interior dijeron a la diaria que el ministro y el nuevo comando de la Policía Nacional se encuentran en un período de análisis de las diferentes unidades y, al momento, no se ha tomado ninguna decisión.
Según informó el periodista Gabriel Pereyra, el director de Investigaciones, Nelson Albernaz, de quien dependían Inteligencia, Drogas, Interpol y Delitos Complejos, entre otras reparticiones investigativas, es una de las próximas remociones.