La radicalización del discurso del gobierno, que pone todos los problemas de la educación en el accionar sindical, no ayuda a generar un ambiente de diálogo necesario.
Para el historiador Gerardo Caetano, “no es realista” pensar en esa posibilidad; y la experta en estudios internacionales Isabel Clemente aseguró que habrá reacciones de los socios del bloque