Deporte

Tras la victoria ante Ecuador en la última fecha y el consecuente primer puesto en el grupo, la selección de Uruguay arranca hoy la etapa más importante del torneo continental. No en detrimento de lo anterior, que dejó buenas sensaciones en un equipo compacto y versátil a la vez y lleno de confianza por los resultados obtenidos, sino porque en toda etapa decisiva de cualquier campeonato están depositados los más significativos anhelos: consagrarse campeón, clasificarse a la Copa del Mundo. Creemos mucho en la forma, en cómo se llega, por más que el camino se haga al andar. Los buenos rendimientos son impulsos, avales si se quiere, y empujan la idea de la selección celeste.

No será fácil la parada de Danubio esta noche por la Copa Libertadores de América. Con dos derrotas a cuestas, hoy a las 20.00 la franja recibirá a Corinthians, de Brasil, en el estadio Luis Franzini e intentará obtener los puntos que le permitan seguir en carrera. En caso de ganar, los brasileños darán un paso muy grande hacia los octavos de final.

El conjunto uruguayo jugó bien, más allá de que el resultado lo muestra sin nada. Fue una buena demostración de audacia y personalidad, pero en el fútbol, como en todo juego, perder es una posibilidad. Con un primer tiempo jugado con confianza, Danubio se tiró en el segundo a ganar. Lógico. Y parecía que sí, pero las certezas duraron un rato. La realidad es cambiante, y diez minutos le valieron a Corinthians para meter dos goles y liquidar el pleito. Las razones deportivas fueron varias, pero la más contundente fue la efectividad. Aunque generó situaciones, Danubio no supo concretarlas.

Mucho se habló estos días sobre si la Liga Uruguaya de Básquetbol tendría que seguir su actividad en otra cancha al no estar disponible el Palacio Peñarol, alquilado para el evento Holiday on Ice. Las instituciones involucradas se reunieron y decidieron descartar la opción de jugar en Maldonado el inicio de las llaves semifinales, por lo cual el torneo quedó suspenido.

En Pacaembú se necesitaba un base para armar el equipo. Llegó la oferta, cargó la maleta de su historia y se fue a jugar a Mercedes. Hacía tiempo que Daniel Rivero escuchaba hablar, en el ambiente del básquetbol, de lo bien que está la liga del litoral. Probó y le gustó tanto que quiere volver. No es para menos: formó parte de un club que obtuvo el segundo campeonato de su existencia.

Con gol del argentino Matías Castro cuando faltaba poco para el final, Danubio le dio vuelta el partido a Rampla Juniors en el Olímpico y se impuso 2-1. Sobre el centro de la misma bahía que baña al estadio ramplense está el Parque Capurro: Fénix y Sud América igualaron sin goles un juego copado por la tensión propia de la pelea por la permanencia.

La selección uruguaya que dirige el "Vasco" Santiago Ostolaza jugó su último partido correspondiente al grupo B con la tranquilidad de haberse clasificado al hexagonal final. El partido ante Ecuador se jugaba con los dos equipos clasificados, pero por saber quién sería el puntero del grupo B.

En el Parque Viera Wanderers recibió a Atenas, que está haciendo tremenda campaña en Primera División y arrancó bárbaro este Clausura. Ganaron los de San Carlos 2-1 en un partido de ida y vuelta con goles de Keosseian y Acosta. Gastón Rodríguez, con un precioso zurdazo de tiro libre, abrió el marcador para Wanderers. El equipo de Alfredo Arias, pensando que el jueves deberá jugar ante Palestino en Santa Laura, presentó varios cambios.

Los darseneros se fueron con tremenda sonrisa de La Blanqueada. Venían con una goleada a favor ante Rampla y confirmaron su momento al vencer a Nacional 2-1 de visitantes. Con un golazo de Leandro Rodríguez, dieron vuelta el marcador sobre el final del primer tiempo y se aseguraron los tres puntos en el complemento. Siguen cuartos en la Tabla Anual y se meten en la pelea del Clausura.