Deporte

Los purretes comandados por Fabián Coito lograron el objetivo y se metieron en la Copa del Mundo para menores de 17 años que se llevará a cabo en México. Sí, señores, una selección uruguaya vuelve a participar en una competición mundial. Y como si fuera poco, al mismo tiempo accedió a los Juegos Panamericanos que se disputarán en la ciudad de Guadalajara,también en territorio azteca.

En un partido durísimo los trico lograron una victoria esencial ante el Flu gracias al inapreciable aporte de la dupla conformada porel Morro García y el Muñeco Gallardo, quienes en la segunda parte y después del ingreso del crack argentino, que después fue expulsado, resolvieron el juego. El equipo de JR mantiene la chance de seguir adelante en la Copa Libertadores y para ello deberá vencer al América de México en las próximas semanas.

Fue intenso, combatido más que jugado, peleado a la uruguaya, también estresante para el hincha. Espectáculo dentro y fuera de la cancha, con las tribunas muy bien cubiertas. Se esperaba más desde un punto de vista estrictamente futbolístico, hablando de técnica individual y colectiva: en eso no convenció.

El murmullo agarró una rosca infernal. Después estalló una gritería ronca, visceral, de esas que el alma pronuncia. La catedral tembló. La leyenda quedó flotando en un suspenso casi magistral cuando Marcelo Muñeco Gallardo se bamboleó casi cansino, como esos muñequitos de torta de cumpleaños, y acomodó en cámara lenta la guinda en la línea misma de la medialuna del área. Todas las miradas brillosas quedaron pegadas, igual que un golpe de corriente, a la figura del argentino. Me pareció ver en la suela de sus zapatos restos de crema chantilly. La pelota cortó el aire con un zumbido mágico.

Fue confirmada la ciudad de Latacunga para jugarse allí la primera y tercera etapa de la ronda final del Campeonato Sudamericano de Fútbol Sub 17, a pesar de los problemas que se registraron en esa ciudad andina con la iluminación del estadio La Cocha (El Hoyo).

En un solo partido Pablo Cuevas (número 67 del mundo) logró muchas cosas: ganarle por primera vez a un top 10 del circuito ATP de tenis, por segunda vez a un ex número 1, y pasar a la tercera ronda del Masters 1.000 de Miami. “Éste fue el triunfo más importante de mi carrera”, expresó el salteño el sábado al finalizar el partido, que duró una hora y 55 minutos y culminó 6-4, 7-6. Enfrente tenía al estadounidense Andy Roddick, defensor del título y número 8 del ranking. En primera rueda Cuevas había superado al alemán Michael Berrer y hoy se medirá con el francés Gilles Simon, ranqueado en el puesto 25.