Entre las recomendaciones se señala que puede ser necesario poner un límite de edad para ingresar a cuidados intensivos. El objetivo es reservar recursos escasos para aquellos que tienen más probabilidad de supervivencia.
Lejos de verse a la organización sindical como un advenedizo, o como un adversario oportunista imbuido de un sentido de “lucha de clases”, lo esencial es que se trata de un interlocutor que reclama un diálogo constructivo.
Lo que sí constituye un grave error es la decisión del señor presidente de caminar solo. El gobierno se encerró en sí mismo. No sale, ni da ninguna señal de salir, de los límites de su “coalición multicolor”.
Hoy más que nunca se debe construir un gran acuerdo nacional, en el que participe la totalidad del sistema político junto con las organizaciones sociales, sindicales y empresariales.
Es hora de pensar y poner en práctica nuevos modos de relacionamiento de los humanos entre sí y con los demás animales. Relaciones libres, de solidaridad y apoyo mutuo.
Todos deberíamos aportar. La contribución del sector privado, y entre ellos principalmente la de los acaudalados, reclamada por distintas voces, debería ser convocada