4.581 casos nuevos de coronavirus se registraron este jueves y con esa cifra se batió un nuevo récord de contagios. La respuesta a este aumento en la cantidad de casos se encuentra, en parte, en el aumento en la cantidad de test realizados, que llegó a 21.201, cuando días anteriores rondaba los 14.000, pero también se puede buscar dos semanas atrás, entre el 1º y el 9 de mayo, cuando se registró un aumento en la movilidad de los uruguayos.

El ministro de Salud Pública, Daniel Salinas, informó que el análisis que se hace desde la secretaría de Estado es que este récord de casos se produjo por efecto de la movilidad en la primera semana de mayo, en particular la que derivó del Día de la Madre, el domingo 9, que no sólo implicó la reunión de muchas familias sino también un alto movimiento en los espacios de compras.

Según dijo el jerarca a Subrayado, a esa conclusión se llega a partir de los datos aportados por los directores departamentales de Salud y el departamento de Vigilancia Epidemiológica, que constató que este rebrote de casos está integrado en su mayoría por contagios intrafamiliares.

En diálogo con la diaria el matemático Marcelo Fiori, que integra el Grupo de Datos del GACH y el Grupo Interdisciplinario de Análisis de Datos Covid-19 (Guiad), dijo que “todavía no se puede decir que este aumento sea producto del Día de la Madre; algunos casos pueden ser, sobre todo por los que se detectan a través de test rápidos, pero creo que no es atribuible completamente al Día de la Madre”.

Según explicó el académico, “un evento puntual que marque una actividad inusual alta no va a producir una suba puntual a los 14 días, sino que el aumento de casos se va a ver suavizado alrededor de dos semanas después. Nunca es esperable ver exactamente un pico a las dos semanas, sino algo suave”. Además, coincidió en que el movimiento no fue tanto particularmente ese domingo, sino los días previos, principalmente gracias al movimiento en centros comerciales.

Consecuencias del aumento de la movilidad

La situación en Uruguay ha empeorado en los últimos días y la tasa R, o de reproducción del virus, es uno de los principales indicadores a observar. En pocas palabras, es la cantidad promedio de personas que contagia cada infectado: cuando el R es mayor que 1 quiere decir que la epidemia se está expandiendo, y si es menor que 1 que se está extinguiendo. Según se observa en el monitor covid que desarrolló el GACH junto a Agesic, el R pasó de 1 el 6 de mayo y no volvió a bajar (salvo el 12 de mayo, que estuvo en 0,99), y llegó a un pico de 1,10 el jueves 20 de mayo.

Otra gráfica que refleja el empeoramiento de la situación es la de casos activos. Según el mismo monitor, desde el 10 de mayo los casos activos no han parado de aumentar, salvo por un leve descenso entre el 15 y el 17. El pico máximo de casos activos en el año se registró el 10 de abril, cuando se superaron los 35.500; durante el mes siguiente la caída fue relativamente sostenida hasta que comenzaron a aumentar los casos, llegándose este jueves a 30.973.

Casos activos de coronavirus

Precisamente, uno de los datos que había prendido las alarmas al comienzo de esta semana entre los científicos e investigadores que hacen un seguimiento de la evolución epidemiológica fue el sensible aumento que se ha registrado en la movilidad, incluyendo el pico en el Día de la Madre y los días previos al domingo 9 de mayo, sobre todo en lo que respecta a las variables “supermercados y farmacias” y “tiendas y ocio”.

Desde el GACH se había advertido en la semana que este aumento de la movilidad podría generar un pico de nuevos casos que llegaría a un máximo el domingo 30 de mayo. Según el reporte que hace el Guiad, el pico más bajo de la movilidad este año fue a comienzos de abril y corresponde al fin de la Semana de Turismo. A partir de ese momento la movilidad estuvo en aumento, en particular desde el 1º de mayo hasta llegar al pico más alto el jueves 13.

En el informe que elaboró el Guiad en febrero sobre la movilidad se destaca que “se encuentra en relación directa con las medidas gubernamentales: a mayores niveles de medidas restrictivas la movilidad se encuentra más reducida”. Los investigadores analizan “la influencia de la reducción de movilidad sobre la velocidad de crecimiento/decrecimiento del indicador P7 (promedio en siete días de casos nuevos por cada 100.000 habitantes), y se muestra que niveles altos de reducción de movilidad dan lugar a un decrecimiento en el índice”.

Para Fiori, “hay una relación bastante marcada entre la movilidad y la tasa de contagios; cuando se redujo la movilidad desde mediados de marzo a Turismo, se vio, dos semanas después, una reducción muy predecible de la tasa de contagios. Cuando la movilidad volvió a aumentar, se predecía que la tasa de contagios iba a crecer, y eso fue lo que pasó”.

La vacunación tiene efectos “lentos” en la baja de contagios

Para el matemático, “hay dos cosas que van en sentidos contrarios: por un lado, la movilidad está en niveles que no hacen reducir la cantidad de casos, por lo que se va en dirección de un ritmo peligroso de la epidemia; por otro lado, el nivel de vacunación avanza muy bien y reduce el ritmo de contagio. Sin embargo, la vacunación está jugando el partido contra la movilidad y por ahora este nivel de vacunación no es suficiente”.

Fiori utilizó el modelo de predicción del efecto de la vacunación que se usa en Uruguay con los datos que aporta Israel, un país que logró dominar la pandemia en base a una vacunación masiva de su población. En ese país, “se ve claramente cómo en un momento se desacopla la movilidad de la tasa de contagios, es decir, la movilidad aumenta y la tasa de contagios disminuye, y eso es claramente un efecto atribuible a la vacunación. Eso todavía no se ve en Uruguay, y se va a ir viendo paulatinamente, muy despacio”, advirtió.

La vacunación puede llevar el R a valores menores que 1, pero está demostrado que la velocidad con la que bajan los contagios gracias a la vacunación es lenta, “no es una bajada comparable con hacer un lockdown o unas medidas no farmacológicas más severas”, detalló Fiori.

El matemático considera que hay una sola solución al aumento exponencial de casos: medidas del gobierno que reduzcan la movilidad en la población. “No hay otra manera. Miremos cualquier otro país y, salvo en Israel, gracias a la vacunación masiva, no se ha podido lograr el control si no es con estas medidas que apuntan a reducir drásticamente la movilidad”.

Sin embargo, los últimos anuncios del gobierno cesan en parte las medidas que se habían tomado para reducir la movilidad: se abren gimnasios y free shops y la presencialidad en la educación vuelve parcialmente. Para Fiori, estas medidas no van a provocar un aumento de casos, pero evidentemente no ayudan a reducirlos. El matemático opinó: “Yo espero ver un descenso de casos, no una meseta, porque eso implica que se mueran 1.600 personas por mes, algo que en ningún momento va a ser algo aceptable. Me parece que la única manera de reducir estos números, que no nos pueden ser indiferentes, es tomar medidas que reduzcan la cantidad de casos significativamente, eso es algo que espero desde fines de marzo y no lo veo”.