Lucas Zanolli tenía 18 años y fue asesinado luego de ir a mostrar su auto, este lunes, en la zona de Colón. Era el menor de cinco hermanos y fanático de los autos. Se había recibido como mecánico en Talleres Don Bosco y montado un lavadero como salida laboral.
Había hecho una publicación en Facebook para vender su vehículo. Este martes encontraron su cuerpo y su auto en una vivienda en Jardines del Hipódromo. Fue asesinado mediante estrangulamiento.
Tres personas fueron detenidas en el lugar. Un hombre de 20 años, su madre y su hermana. La audiencia de formalización será este jueves y estará a cargo de Adriana Edelman, en representación de la Fiscalía de Homicidios.
Luis Alberto Heber, ministro del Interior, se había referido al caso más temprano en rueda de prensa. Dijo que “es un espanto” y que “ha conmovido a todos en Uruguay” por “el grado de violencia que se dio en este caso; la injusticia”. “Ninguna muerte es justa, esta es más injusta, producto de que era un muchacho querido en el barrio”, agregó.
El ministro también se refirió a la hipótesis de secuestro que se manejó, porque la familia de Lucas recibió una llamada en la que le “reclamaban dinero”. Se analiza si hay una organización delictiva detrás, porque según contó Heber “es un número que ya apareció repetido en otras ocasiones, de ahí la sospecha”. Interpol y la Policía mexicana investigan estos hechos, “porque el teléfono es de México”.
Para este miércoles se convocó a través de redes sociales a una concentración en reclamo de justicia por el homicidio de Lucas. Familia y amigos del adolescente cortaron el tránsito por momentos e hicieron sonar motores de varios autos que acompañaron la movilización. Sus amigos sostenían pancartas delante de los autos que se detenían. Todos reclamaban lo mismo: “Justicia por Lucas”.
Uno de los organizadores de la concentración, perteneciente al grupo Volkswagen G1, dijo a los medios presentes en el lugar que “la historia de Lucas es algo que le llegó al Uruguay entero, porque tan sólo tenía 18 años y era un gurí que laburaba”. “Vivía por los fierros y por la familia”, aseguró. Señaló que por eso, “con un grupo de autos, decidimos organizar una juntada entre todos y difundir esta paralización por la indignación que tenemos todos”.
“Agradecemos a las personas que están acá en este momento difícil para nosotros. El Uruguay entero está mal por este pibe de 18 años que no merecía morir por un auto”, afirmó el organizador. “Venimos a manifestarnos en paz y que esto llegue, que llegue a los corazones del Uruguay”, concluyó.
De fondo el rugido de los motores en recuerdo de Lucas se fundía con un canto al unísono: “Queremos justicia”.