A pesar de las advertencias sobre la nueva ola de coronavirus que llegan de países del norte, por estas fechas muchos deseamos volver a la costumbre de movernos para visitar afectos durante las fiestas o para emprender unas vacaciones veraniegas. Los trabajadores del transporte, sin embargo, han tenido días muy complicados: a muchos se les adeuda buena parte de sus salarios, entre otros problemas. Más grave, incluso, es lo de algunos camioneros, cuyo régimen de trabajo incluye extensas jornadas frente al volante, en una invitación al accidente que muchos han pagado con sus vidas.

Por ello, ha habido diversas interrupciones en los servicios de transporte, aunque finalmente se llegó a acuerdos de diverso tipo, pero una manifestación en el puerto terminó con la intervención de la Policía y un trabajador lesionado, en un episodio que ilumina algunos efectos de la ley de urgente consideración (LUC) que se busca impugnar.

La LUC tiene un talante antisindical, pero su vinculación con el proyecto de ley que votaron el miércoles los diputados de la coalición gobernante, que obliga a los sindicatos a tener personería jurídica no es lineal. Se trata, sí, de una injerencia, según los criterios de la Organización Internacional del Trabajo, en la forma en que funcionan los gremios, aunque hay que notar también que el resultado podría haber sido mucho peor si se atendiese a los reclamos de la extrema derecha de la coalición.

La extrema derecha chilena, en cambio, fue derrotada hace siete días por una coalición de partidos y organizaciones de izquierda. Gabriel Boric se convertirá en el presidente más joven de Chile; tendrá 36 años cuando asuma, pero el dato no tiene que ver sólo con su edad, sino con su trayectoria política, cimentada en las protestas estudiantiles de principio de siglo, en su base electoral, fuertemente vinculada al estallido social de 2019 que desembocó en el proceso de redacción de una nueva constitución, y en su programa de gobierno, que busca democratizar y ampliar el acceso a la educación, la salud y el bienestar, en un país que hasta hace poco se consideraba un ejemplo de “buena conducta” macroeconómica y que sin embargo aloja enormes desigualdades. Como decíamos la semana pasada, lo que decidió Chile impactará en el resto de la región, así como lo hará la marcha del gobierno de Boric y su joven equipo.

Volviendo a Uruguay, el hasta hace pocos días líder sindical Fernando Pereira fue proclamado presidente del Frente Amplio tras su amplísimo triunfo en las elecciones internas, y se apresta a dirigir a la fuerza de izquierda en la campaña para derogar 135 artículos de la LUC.

Son días de reuniones y de vacaciones para muchos, y aunque se han flexibilizado muchas medidas contra la pandemia, no conviene bajar la guardia, como advierte Rafael Radi, en un panorama epidemiológico que seguramente recibirá el impacto del turismo.

Además, el sistema de salud ha sufrido un golpe con el cierre de la mutualista Casa de Galicia, que impacta a usuarios y trabajadores, y también produce una imagen negativa a nivel simbólico.

En todo caso, debería de ser un fin de año un poquito menos ruidoso, si atendemos a los moderados comienzos de regulación de la pirotecnia en varias partes del territorio.

Hasta la próxima.