Silicon Valley se sacude y es noticia por una demanda judicial que involucra el robo de secretos comerciales; Tony Fadell y Andy Rubin son dos pesos pesados que se verán ante un juez más pronto que tarde. Ex vicepresidente de la división de iPod en Apple, Tony Fadell fue nada más ni nada menos que el que le vendió la idea más prototípica del famoso reproductor de música portátil a Steve Jobs. Andy Rubin, por otra parte, es el responsable de haber creado el sistema operativo Android, ese que inunda millones de celulares en el planeta.

Dado que el iPod está en vías de extinción, es claro que Fadell en estos momentos se dedica a otras cuestiones; ahí es cuando entra en juego Keyssa, la empresa que fundó en 2008 y que a partir del año siguiente se dedicó a Kiss Connectivity, una tecnología desarrollada por el empresario que básicamente permite conectar los celulares a otros dispositivos sin recurrir a intermediarios como el bluetooth o redes inalámbricas como el wifi. El juicio envuelve la ruptura de un acuerdo de confidencialidad de este implemento por parte de Essential, una empresa fundada por Andy Rubin, que se enfocó en crear un teléfono móvil y con quien Fadell aseguró que compartió sus ideas sobre Kiss Connectivity por aproximadamente diez meses, ultimando el vínculo luego de ese tiempo. Según la versión demandante, al tener esta información, Essential contrató a una empresa de la competencia de Keyssa y desarrolló un chip con esta tecnología, que le permitió conectar su celular a una cámara accesoria.

La agencia británica Reuters recibió un mail de Keyssa en el que aseguran que no percibieron ningún tipo de compensación por el uso que Essential le dio a la información y a la guía por parte de los de Fadell: “Emprendemos esta acción porque nuestros intentos de resolver este problema mediante el diálogo no han sido exitosos”, afirmaba el comunicado enviado a Reuters.