Se empieza a escuchar
» IGTV. No conforme con afanarle descaradamente a Snapchat toda su funcionalidad, ahora Instagram (cuyo dueño, recordemos, es Facebook) va por YouTube, con la posibilidad de crear canales para subir videos de cualquier duración. La mayor “novedad” de la plataforma es que utiliza el formato vertical de video (en la posición que normalmente sostenemos el celular), popularizado por aplicaciones como Snapchat. Eso hace que sea una plataforma pensada para generar, editar y consumir contenido en pantallas móviles únicamente.
» Project Debater. IBM sorprendió a muchos cuando su sistema de inteligencia artificial Watson ganó de forma autónoma el concurso de televisión de preguntas y respuestas Jeopardy en Estados Unidos. Este fue el último de una serie de “desafíos humano-computadora” de la empresa, comenzando por la célebre victoria de DeepBlue sobre el maestro de ajedrez Gary Kasparov. Ahora, impulsado por una nueva supercomputadora llamada Summit, se embarcaron en crear un sistema capaz de participar en debates, argumentando y rebatiendo argumentos de oponentes humanos. El sistema participó exitosamente en dos debates organizados por la empresa, convenciendo a 20% del público de cambiar su opinión en el segundo. Esto no sólo abre nuevas puertas para la inteligencia artificial, sino que –más importante– posibilita que si algún día las computadoras nos dominen, lo hagan no a lo Terminator, matándonos a todos, sino convenciéndonos de que deberíamos rendirnos ¡con excelentes argumentos!
Se anda diciendo
» Mejor wifi. Quizás la sigla WPA2 les suene de poner contraseñas de wifi: es el protocolo de seguridad que se utiliza desde 2004 para eso y últimamente su utilidad e integridad estaban severamente comprometidas por varios métodos capaces de vulnerarlo. Afortunadamente, la Wi-Fi Alliance (órgano rector del estándar inalámbrico) aprobó la especificación WPA3, que hace más difícil adivinar passwords de redes por el método de fuerza bruta, y así obtener datos de estas. De la misma manera, el estándar de transmisión de datos también irá avanzando a la nueva especificación 802.11ax, optimizada para soportar muchos dispositivos manteniendo buenas velocidades, una necesidad dada por el universo de aparatos conectados a internet (la llamada “internet de las cosas”) que no para de crecer. El proceso de adopción de ambos se dará durante los próximos años, y probablemente ni sepamos cuando lo estemos usando, ya que son retrocompatibles y se irán incorporando en los dispositivos nuevos.
» Más certeza con huellas digitales. A pesar de que la franquicia de series CSI nos quiera convencer de lo contrario, el análisis de huellas dactilares es falible y tiene componentes sustantivos de interpretación. Este año –por primera vez– se utilizó en un caso real en Estados Unidos un software llamado FPStat que usa cálculos estadísticos para expresar la probabilidad de que la similaridad entre dos huellas dactilares recogidas pueda ser vista efectivamente en dos huellas de una misma persona. En otras palabras, qué tan probable es que un mismo dedo haya generado una huella encontrada y otra tomada en la comisaría, por ejemplo. Así que ya saben, la próxima vez que vean en la tele una computadora que busca huellas en una base de datos y dice “99% de coincidencia”, es 100% fruta.
Ya nadie dice
» Trencito en el celular. En una medida equivalente a usar una ojiva termonuclear para matar una mosca, el gobierno de Argelia decidió cortar completamente el acceso a internet en el país por varias horas al día y bloquear completamente Facebook durante los cinco días en los cuales estudiantes de secundaria toman sus exámenes. La medida responde a que las preguntas de estos exámenes se filtraron en 2016 y fueron compartidas en las redes por los estudiantes. Sólo resta imaginar qué harán el día que se den cuenta de que los bancos se pueden usar para lavar dinero o los autos para atropellar gente.
» Cuentas sospechosas en Twitter. 70 millones de cuentas identificadas como “sospechosas” fueron eliminadas de Twitter en los pasados meses, en un esfuerzo de la empresa por –finalmente– encarar sus problemas de spam, abuso y difusión de “noticias falsas”. Aunque no se dieron detalles del tipo de cuentas eliminadas en la operación, ni de qué objetivo específico se perseguía, se espera que se trate de un primer paso para controlar el discurso de odio y cultura de abuso (especialmente a mujeres y minorías).