“La novedad del juego, la ilusión del juego de ser murguistas en conjunto. El gusto de jugar en serio ese juego. Hoy lo leo como una manera de aprendizaje, un ejercicio inventado de libertad y crecimiento, pero lo cierto es que la chispa inicial fue el juego”, dice Yamandú Cardozo sobre lo primero que recuerda de aquel lejano 2001, cuando se fundó la murga Agarrate Catalina, que hizo un recorrido por el carnaval –y fuera de él– “inmensamente más increíble” del que jamás se hubieran atrevido a esperar sus integrantes.

“Fue más intenso, más extendido, también a veces más doloroso, más revolucionario y salvador en nuestras vidas de lo que nunca hubiéramos apostado. El hacia dónde, el cómo y el con quiénes nos llevó la vida atada a la Catalina, a las personas que la componemos; era absolutamente implaneable”, dice Cardozo, director de la murga, que se está preparando para festejar sus dos décadas, a toda pompa, este lunes en el Teatro de Verano.

Cardozo vivió con tristeza la suspensión –debido a la pandemia– del carnaval pasado, por “la falta del ejercicio colectivo espontáneo de un pueblo desnudándose frente al espejo del humor, reconociéndose e interpelándose con horizontalidad salvaje”. Además, se sumó que había “un montón de cosas para decir, desprendidas del nuevo panorama político, que no pudieron decirse”.

El concurso de carnaval del próximo verano será el primero con el gobierno del presidente Luis Lacalle Pou. Escribir los textos de la murga y las eventuales críticas para Cardozo implica “un gran desafío” que siempre le interesó “pero que en este contexto se redimensiona”: “El de decir y cantar exactamente lo que nos urge compartir, de la forma innegociable en la que queramos expresarlo, sin resignar un milímetro de las convicciones pero peleando fuertemente con la tentación del discurso nada más que calientagradas, con el gol seguro del panfleto. Algunas veces, esa pelea, ese intento nos resulta más fructífero que otras, pero siempre la damos, siempre la traemos al proceso de escritura”.

En cuanto a su opinión concreta, como ciudadano, sobre la marcha gobierno de coalición, Cardozo dice que “hay muchísimas cosas” que lo “distancian tremendamente de la idea, del rumbo y de los modos que elige este gobierno para funcionar”. Aclara que respeta “otras cosmovisiones” y está convencido “de que hay un montón de personas muy honestas y comprometidas dentro de esta administración y de sus votantes y defensores”, pero “no hay nadie” que haya logrado hacerle ver “que a este gobierno le interesa realmente emparejar en algo la pelea, igualar la desventajosísima carrera para la cantidad de compatriotas que están, desde hace generaciones, en una profunda indefensión”. Agrega que no siente, “en lo más mínimo, [que haya] un interés real en recortar privilegios de sectores ya privilegiados en favor de las inmensas mayorías de desprotegidos y desprotegidas”.

Agarrate Catalina ganó el concurso de carnaval en cinco oportunidades, casi la mitad de las veces que se presentó. Ante la pregunta de cuál de todas esas veces le dio más satisfacción, Cardozo dice que le cuesta ordenar los concursos en los que resultaron victoriosos con una lógica de mayor a menor satisfacción, porque cada uno tuvo su forma particular de llenarlo de alegría.

La primera victoria, en 2005, la define como el “maracanazo” en sus vidas, “con la inmensa llegada a los barrios, la sensación de esperanza flotando en todo el país y la suerte generacional de la coyuntura”. La de 2006, “cuando ya nada podía ser mejor”, salió por primera vez con sus dos hermanos sobre el escenario, Martín y Tabaré. Respecto de la victoria de 2008 agrega que “fue increíble para la murga ganar con esa búsqueda removedora hacia adentro y ese experimento estético que significó El viaje”. En 2011 ganaron con un espectáculo “intensísimo, compuesto totalmente sobre música inédita”.

“Y 2020 también es especialísimo porque es el último, porque siento que la murga alcanzó, como colectivo, una madurez artística y estética que me enorgullece muchísimo y porque tengo la ilusión de que significó una alegría para muchísima gente volver a ver a la Catalina en ese lugar", finaliza.

Agarrate Catalina este lunes a las 21.00 en el Teatro de Verano. Entradas por Tickantel desde $ 840 a $ 1.240.


Festival de Jazz en el Solís

De lunes a miércoles en el Teatro Solís tendrá lugar la edición número 14 del Festival de Jazz de Montevideo, que es un homenaje a Horacio Bocho Pintos, saxofonista, presidente y fundador del Hot Club de Montevideo, que falleció en abril. Las entradas se consiguen por Tickantel a $ 600 y hay 2x1 para suscriptores de la diaria.

El lunes a las 19.00 dará el puntapié inicial Bandoneonas, el cuarteto de bandoneones integrado por Alejandra Genta, Sandra González, Verónica Rumbo y Abril Farolini, que empezó en 2019 y abarca tango y músicas afines de distintas épocas y compositores, “intercalando clásicos del género con composiciones recientes y obras menos conocidas”, según la gacetilla del evento.

A las 20.30 se presentará la banda de Martín Muguerza, con su disco Andamiento (2020), ganador del premio Graffiti en la categoría Mejor álbum de jazz de 2020, además de presentar música del nuevo disco Jazz cuarteto, homenaje a Paul Motian. El programa del lunes se cerrará a las 21.30 con Alejandro Luzardo y La Candombera.

El martes a las 19.00 se presentará el cuarteto de saxofones Ostinato; a las 20.30, el guitarrista portugués Gaspar Varela, y a las 21.30, el cantante italiano Fabio Lepore y Lucian Echeverría Gypsy Jazz Trio de Uruguay. Se trata de un proyecto que mezcla “el típico sonido gypsy jazz con lo melódico”.

Por último, el miércoles a las 19.00 se presentará Travesía, un espectáculo con música de raíces flamencas a cargo de los guitarristas Erika González y Gonzalo Franco. El festival cerrará a las 21.30 en el bar Montevideo al Sur (Maldonado y Paraguay), con entrada gratuita, donde habrá una jam session a cargo de Trío al Sur (Santiago Lenoble en batería, Marcos Caula en guitarra y Nacho Correa en contrabajo).

Los Dinámicos en Sauce

Mañana a las 18.00 en el Centro Cultural casa de Artigas de Sauce, Canelones (Av. Artigas esquina Carmelo René González), se presentarán Monkelis, Amazing One Man Band, Chelo Lion and His Yellow Fingers y los locales Los Dinámicos, que celebran dos décadas de surf rock criollo.

Trotsky Vengarán en Sala del Museo

La banda de Guillermo Peluffo y compañía se presentará hoy a las 22.30 en Sala del Museo (Rambla 25 de agosto y Maciel). Las entradas se venden por Abitab a $ 780.