Este sábado a las 17.00 se escenificará por única vez Ficción o desaparecer, una creación producto de la residencia de cinco días que la dramaturga Marianella Morena realizó en el Teatro Solís con la actriz brasileña Paula Cohen y la abogada Gianella Bardazano, más un grupo compuesto por 20 mujeres de diversas profesiones y oficios.
La “coralidad social” surgió de una convocatoria que tuvo más de 200 interesadas. “Hay desde química hasta carpintera, de Montevideo, Florida, Treinta y Tres, Pando, Ciudad de la Costa y Bella Unión como de Argentina, Colombia y Brasil”, aclara Morena.
El punto de partida fue la obra de la filósofa política francesa Olympe de Gouges (1748-1793), que con el pseudónimo de Marie Gouze firmó la Declaración de los Derechos de la Mujer y de la Ciudadana. “Desde ella trabajamos el concepto me cortaron la cabeza, explica la dramaturga, y adelanta: “El resultado es una performance que mezcla técnicas multidisciplinarias más mis ideas sobre lo escénico en una convivencia mestiza entre lo real y la ficción. La abogada, por ejemplo, estará diciendo un texto sobre la ley. Olympe fue decapitada por la revolución francesa en 1793 por su actitud de constante rebeldía frente a la ausencia de las mujeres en la declaración de los derechos del hombre y el ciudadano y su nula participación política. Fue ensayista, poeta, dramaturga, filósofa, narradora, pero, sobre todo, fue muy valiente y muy adelantada”.
Aunque, tal como se verá, será un evento único, la performance tendrá versiones en otras partes. “La replicaremos en San Pablo con mujeres latinoamericanas y estrenaremos el año que viene un espectáculo de sala en San Pablo. La proyección en tres años es hacerlo en diferentes lugares de Latinoamérica antes de llevarlo a Europa. En cada ciudad donde se realice se trabajará la misma modalidad y dinámica: 20 mujeres de diversas profesiones, una abogada y la misma actriz: Paula. Es decir, hay un equipo que cambia y otro que se mantiene”, adelanta Morena.
“El mestizaje genera convivencia pacífica y habilita desde la práctica un pensamiento más libre, amplio y justo sobre nuestra percepción de lo real, con una dosis poética, tan apaleada últimamente, y con una elasticidad frente a lo posible. Tenemos el sí como premisa para jugar y encarnar”, se entusiasma Morena.