“¡Simplemente gracias!”, escribió el nacionalista Miguel Abella (Todos por Maldonado) en su cuenta de X cerca de las 21.00, cuando ya se había montado un estrado frente al local central partidario fernandino para celebrar su victoria como próximo intendente de Maldonado. Hacia allí caminó desde su residencia, de la mano de su esposa, junto a votantes enfervorizados y rodeado de periodistas ávidos por conseguir sus primeras declaraciones. Primero subieron al estrado colaboradores de su campaña y dirigentes de otros partidos de la coalición que acompañaron su candidatura, para dar sus discursos de triunfo.

A las 20.45 el otro candidato nacionalista, Rodrigo Blás, reconoció el triunfo del postulante del sector del intendente Enrique Antía. “Miguel Abella será el próximo intendente de Maldonado. Vayan mis felicitaciones al querido compañero y gracias a todos los que dejaron todo en la cancha por su maravilloso trabajo y apoyo. ¡Viva Maldonado! ¡Viva el Partido Nacional [PN]!”, escribió Blás en sus redes sociales. Un rato antes, Blás se presentó en la casa de Abella para saludarlo personalmente, según habían pactado durante la campaña, declaró Abella más adelante en una rueda de prensa.

Antía dijo que el FA tuvo el castigo merecido

Ya se veían y escuchaban algunos fuegos artificiales, bocinas y vítores cuando Antía subió al estrado para destacar el logro del Pelado, su hombre de confianza durante los últimos 25 años, y asegurar que “la gente le renovó la confianza al PN porque cumplió con todo aquello con lo que se comprometió” en la última década.

Acto seguido, Antía sostuvo que “Maldonado respaldó la confianza de aquellos que trabajaron para hacer más grande al departamento y castigó el estilo de política de palo en la rueda y el no a todo. Esto se lo merecían. Ir en contra de todo va en contra del pueblo. Siempre hay que pensar a favor de las cosas para poder llegar lejos”, agregó el intendente, en una clara alusión al opositor Frente Amplio (FA).

Después, la noche céntrica de Maldonado explotó cuando Abella y su nieto Lautaro se acercaron al micrófono. “Presento a mi tata intendente. Quiero que todos sean felices por toda la vida”, dijo el niño, con palabras que, según su abuelo, “no estaban preparadas”.

A continuación sonaron algunos versos del pegadizo jingle “Quiero Abella, ¡ya!” y el intendente electo inició un breve discurso en el que les agradeció a las ocho listas que comenzaron a trabajar con él para ganar las internas partidarias en 2023, el punto de partida para su carrera por la Intendencia de Maldonado (IDM). Luego manifestó su convicción de que el PN mantendrá el gobierno en los ochos municipios y dejó de hablar para abrazarse con Antía y bajar juntos del escenario.

Más tarde, en una apretada rueda de prensa, Abella adelantó que su primera línea de trabajo será “lo social”. “Siempre lo dije y lo tengo bien claro: vamos a tratar de llevar la parte social de la IDM a los barrios y a trabajar con la gente”, sostuvo, y añadió que cuando se confirmen los resultados en los municipios su plan será recorrer cada uno en la jornada de este lunes.

El martes Abella se reunirá con el sector Todos por Maldonado y luego le solicitará una audiencia al intendente para “empezar a pautar cosas a concretar en estos meses”. “No queremos que la gente pierda tiempo. Es el mismo partido, el mismo sector y hay cosas que podemos llevar adelante”, puntualizó.

La llamada de Orsi y una invitación al diálogo

De todos modos, el intendente electo dijo que conversará con todos los sectores: les mandará una nota a todos y también a los demás partidos, tal como aseguró en su campaña. En cuanto a su relación con el FA, dijo que es “muy buena”. “A los 20 minutos de que empezó la algarabía recibí una llamada del presidente Yamandú Orsi, cuando todavía no quería moverme de casa”, reveló. “Nos invitó al diálogo, que por supuesto vamos a mantener. Es una llamada a tener en cuenta porque buscamos la apertura y el diálogo, no sólo por Maldonado, sino por el Uruguay interno. Haber recibido su llamada significa que habrá una buena relación y que vamos en buen camino de lo planteado en la campaña”, añadió. Del FA también recibió llamadas del diputado Joaquín Garlo, del candidato Eduardo Antonini (ambos del Movimiento de Participación Popular) y del coordinador de la actual bancada de ediles, Sergio Duclosson, “con la bandera frenteamplista” sobre los hombros.

El intendente electo tardó un largo rato en regresar a su casa, cercana al escenario, en medio de una enorme cantidad de personas que intentaba saludarlo. Luego de los encuentros que tiene previstos para la próxima semana y media, Abella se tomará licencia.

Perspectivas en los municipios

Sobre la medianoche del domingo, el escrutinio primario de la Corte Electoral marcaba que los votos del PN casi triplicaban a los obtenidos por el FA. También parecía claro que el partido gobernante mantendrá su hegemonía en los ocho municipios del departamento.

En San Carlos, el FA ya había reconocido la derrota municipal. Las caras largas en los diferentes comités, en los que algunos dirigentes y militantes seguían las transmisiones por televisión y celulares, así lo demostraban. El gobierno carolino será blanco otra vez y su alcalde será Luis Cima (apenas por unos votos sobre Diego Machado), cuyos seguidores abrieron su caravana por la ciudad cerca de la medianoche.

Distinto era el panorama en Solís Grande y Garzón, donde se confirmó que Patricia Martínez (Unión y Cambio) y Nazareno Lazo (Todos por Maldonado) consiguieron la reelección. En Aiguá, en tanto, Daniel Chato Perdomo se perfilaba como ganador, igual que Alejandro Echavarría en Pan de Azúcar.

A esa hora, en Maldonado corría con ventaja Damián Tort, el expresidente de la Junta Departamental, y en Punta del Este Javier Carballal se perfilaba hacia su reelección seguido de cerca por el polémico empresario Rolando Rozenblum. En Piriápolis, los primeros resultados mostraban una diferencia no muy amplia entre los blancos Rene Chiche Graña y Silvana González.