Rusia tiene el objetivo de controlar el sur de Ucrania y unir así el Donbás con la península de Crimea, según dijo el viernes un general ruso. “Desde el inicio de la segunda fase de la operación especial [...] una de las tareas del Ejército ruso es establecer el pleno control sobre el Donbás y el sur de Ucrania”, manifestó el comandante en funciones del Distrito Militar Central de Rusia, general mayor Rustam Minnekéyev. Según citaron la agencia Efe y el diario The Guardian, el militar dijo que controlar esas zonas “permitirá establecer un corredor terrestre a Crimea y ganar influencia sobre instalaciones vitales de la economía ucraniana y los puertos del mar Negro a través de los cuales se envían los productos agrícolas y metalúrgicos a otros países”.

Minnekéyev señaló en declaraciones a la agencia TASS que “el control sobre el sur de Ucrania es además una vía para acceder a Transnistria, donde también se constatan hechos de discriminación contra los residentes de habla rusa”. Transnistria es una región separatista prorrusa de Moldavia. Desde Moscú no hubo una confirmación a las palabras de Minnekéyev.

En respuesta a los dichos del militar, el Ministerio de Defensa de Ucrania dijo que esto pone en evidencia que el objetivo ruso es “imperialista” y va más allá del Donbás. “Dejaron de ocultarlo”, manifestó. Rusia “reconoció que el objetivo de la ‘segunda fase’ de la guerra no es una victoria sobre los míticos nazis, sino simplemente la ocupación del este y el sur de Ucrania”, agregó la cartera.

“Ellos no van a parar. El comando del distrito militar central ruso anunció la próxima víctima de la agresión rusa”, dijo el Ministerio de Defensa ucraniano. “Después de hacerse con el control del sur de Ucrania, Rusia planea invadir Moldavia, donde dicen que los rusoparlantes están siendo oprimidos”.

Por otra parte, según el Ministerio de Defensa de Ucrania, el gobierno de Vladimir Putin se propone presentar su “victoria en el Donbás” el 9 de mayo, cuando Rusia celebra la derrota de la Alemania nazi. “Su objetivo es bastante claro: empujar a las fuerzas ucranianas más allá de las regiones de Donetsk y Lugansk y mantener el corredor terrestre a la Crimea ocupada”, decía el miércoles el portavoz del Ministerio de Defensa, Alexander Motuzyanyk, al canal RBC-Ucrania.

Calle de Bucha, al noroeste de Kiev, mientras Ucrania dice que las fuerzas rusas están haciendo una "retirada rápida" de las áreas del norte alrededor de Kiev.

Calle de Bucha, al noroeste de Kiev, mientras Ucrania dice que las fuerzas rusas están haciendo una "retirada rápida" de las áreas del norte alrededor de Kiev.

Foto: Ronaldo Schemidt, AFP

Números de la guerra

El domingo se cumplen dos meses de esta invasión. A lo largo de ese tiempo, según informó la Organización Internacional para las Migraciones, el conflicto dejó 7,7 millones de desplazados internos en el país. Esto significa que 17% de la población ucraniana ha tenido que dejar sus hogares, señaló Europa Press. A esas cifras se suman los 5,1 millones de refugiados que tiene registrados la Organización de las Naciones Unidas (ONU). En total, casi 30% de la población ucraniana debió dejar sus hogares, ya sea para salir del país o para desplazarse dentro de su territorio.

En la primera quincena de abril se sumaron 600.000 personas a los desplazados que ya había dejado la guerra. De ellas, 60% son mujeres y más de 50% tienen dificultades para conseguir comida.

Fuera de Ucrania, 2,8 millones de personas llegaron a Polonia, que ha sido el lugar que más refugiados recibió. Otros cientos de miles viajaron a Rumania, Hungría, Moldavia, Eslovaquia o Rusia. La mayoría son mujeres, niños y personas mayores.

Lesya, prepara una comida caliente en una estufa de leña en el patio de un edificio residencial de varios pisos en el pueblo de Gostomel, cerca de Kiev.

Lesya, prepara una comida caliente en una estufa de leña en el patio de un edificio residencial de varios pisos en el pueblo de Gostomel, cerca de Kiev.

Foto: Genya Savilov, AFP

Finlandia comenzó a debatir un eventual ingreso a la OTAN

El Parlamento de Finlandia comenzó a debatir el miércoles sobre la posibilidad de solicitar el ingreso del país a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y abandonar así una posición de neutralidad que mantuvo por décadas.

A pesar de las advertencias de Rusia contra una decisión de ese tipo, la invasión a Ucrania impulsó este proceso y disparó el apoyo a la adhesión a esa alianza. Según informó Efe, ese respaldo pasó en menos de un año de 20% a 62%, y también se extendió en el Parlamento, donde la mayoría de los legisladores que ya dieron a conocer su opinión se inclinan a votarlo.

Los partidos que más han apoyado la adhesión son el conservador Kokoomus y el ultraderechista Verdaderos Finlandeses. Todavía falta conocer la posición que adoptarán el Partido Socialdemócrata, al que pertenece la primera ministra Sanna Marin, Los Verdes y la Alianza de Izquierdas. El Partido de Centro anunció que apoyará la decisión que tomen Marin y el presidente Sauli Niinistö, que son quienes tienen a su cargo la política exterior y la de seguridad.

A su vez, el gobierno de Suecia anunció que la ministra de Relaciones Exteriores, Ann Linde, se propone adelantar del 31 al 13 de mayo la presentación de un análisis parlamentario sobre la política de seguridad y el posible ingreso a la OTAN. Linde propondrá a los partidos políticos acelerar los tiempos, debido a la evolución del conflicto y al tratamiento de este asunto en la vecina Finlandia. “Finlandia ya ha difundido su análisis y hay una fuerte presión para que hagamos lo mismo con el nuestro”, dijo Linde a la radio pública de Suecia. En los dos países la derecha es la que impulsa ese ingreso, aunque no esté en el gobierno.

Meses atrás, el oficialismo en Suecia había rechazado la posibilidad de entrar en la OTAN, pero la invasión rusa a Ucrania puso otra vez el tema sobre la mesa. A su vez, un sondeo publicado esta semana por el canal SVT mostró por primera vez un apoyo mayoritario al ingreso a esa alianza.

Tampoco las amenazas de Rusia, que advirtió que podría desplegar armas nucleares en el Báltico si Suecia y Finlandia se unen a la OTAN, ayudaron a mantener una postura más neutral en esos países. “Es absolutamente inaceptable que Rusia amenace de cualquier manera a Suecia o a Finlandia, porque son los ciudadanos quienes deciden su política de la seguridad”, dijo Linde la semana pasada. “Existe un tiempo anterior y otro posterior al 24 de febrero [cuando comenzó la invasión]. Suecia y Finlandia decidirán solas sobre su futuro”, afirmó.

Por su parte, el gobierno de Finlandia señaló que habrá tensiones con Rusia si el país ingresa a la OTAN, pero que mantener la situación actual, después de la invasión a Ucrania, también implica riesgos. Con un ingreso a la OTAN “el efecto preventivo de la defensa de Finlandia sería considerablemente mayor que en la actualidad, ya que detrás estarían las capacidades de toda la Alianza”, manifestó el gobierno en el texto que presentó al Poder Legislativo.

Putin recibirá a Guterres el martes

El presidente ruso, Vladimir Putin, recibirá el martes al secretario general de la ONU, António Guterres, para hablar sobre la situación de Ucrania, informó el portavoz presidencial Dmitri Peskov. Según la ONU, Guterres les propuso a Putin y al presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, visitarlos para tratar sobre los “pasos urgentes para llevar la paz a Ucrania”.