Con Alemania a la cabeza, varios países de la Unión Europea (UE) están empezando a pensar la manera en que sobrellevarán el próximo invierno boreal en caso de que el suministro de gas ruso no se normalice.
La guerra en Ucrania dejó en evidencia la dependencia germana y también de otras naciones del continente del gas ruso, algo que la producción de energías renovables no podrá solventar a corto plazo. Es por esto que el gobierno que preside Olaf Scholz está intentando llenar depósitos, diversificar suministros, recurrir a centrales de carbón y petróleo, además de llamar a la población en general y también a la industria y los gobiernos locales a tomar medidas de ahorro, según informó Efe.
Las tareas regulares de mantenimiento del Nordstream 1 -dispositivo que transporta gas desde Rusia hacia Alemania- y por el que últimamente ya fluía tan sólo 40 % del volumen habitual, según Moscú, debido a la falta de una turbina, y el temor a que Rusia no restablezca el flujo una vez finalizadas las obras, pusieron en alerta a Alemania de cara al próximo invierno.
Desde el 23 de junio está en vigor en Alemania el segundo de tres niveles de emergencia, declarado entonces ante la disminución del suministro procedente de Rusia y los elevados precios de la energía. Hace exactamente una semana, cuando empezaron las tareas de mantenimiento del gasoducto, desde el gobierno se expresó que el suministro estaba garantizado y que por el momento no se plantea declarar el próximo nivel del plan de emergencia, que implicaría la intervención del Estado en el mercado para regular el flujo.
Hace pocos días el ministro de Economía alemán, Robert Habeck, manifestó que el Kremlin estaba utilizando el gas “como un arma” y admitió que su país cometió un “grave error político” al volverse demasiado dependiente de los suministros rusos.
En este contexto, la presidenta de la Comisión Europea, la alemana Ursula von der Leyen, viajará este lunes a Bakú, la capital de Azerbaiyán, buscando establecer un acuerdo con el país caucásico para garantizar el suministro de gas.
“En medio de la continua militarización de Rusia de sus suministros de energía, la diversificación de nuestras importaciones de energía es una prioridad para la UE”, dijo Von der Leyen en Twitter. Según un borrador del documento, al que accedió la agencia Reuters, la Comisión propuso a los países integrantes de la UE un acuerdo con Azerbaiyán para aumentar las importaciones de gas natural y apoyar la expansión de un gasoducto para hacerlo.