Tres de los rehenes de Hamas, secuestrados el 7 de octubre en Israel, murieron cuando soldados israelíes dispararon contra ellos en el norte de la Franja de Gaza. “Durante los combates en Shujaiya, las Fuerzas de Defensa de Israel identificaron erróneamente a tres rehenes israelíes como una amenaza. Como resultado, las tropas dispararon contra ellos y los mataron”, informó un comunicado del ejército, citado por la agencia Efe, en el que no se indica qué día ocurrieron esos hechos.

Los tres fallecidos son Yotam Haim, un músico de 28 años, Alon Lulu Shmriz, un estudiante de 26, y Samer Talalka, un ciudadano beduino israelí de 25, que trabajaba en un restaurante de su familia.

“Después del tiroteo, inmediatamente surgieron sospechas sobre la identidad de los sospechosos y sus cuerpos fueron identificados. Este es un evento trágico que ocurrió en una zona de combate con muchos terroristas. Estamos en la etapa de recopilar los hechos y esclarecer los detalles del evento”, dijo el portavoz del ejército, Daniel Hagari. “Creemos que los tres huyeron o fueron abandonados por terroristas que los mantuvieron cautivos. Hubo un error trágico que investigaremos hasta el final”, agregó, de acuerdo con el diario Haaretz.

“Se han aprendido lecciones inmediatas del evento, que se han transmitido a todas las tropas en el terreno”, afirmó el Ejército, que manifestó un “profundo remordimiento por el trágico accidente” y sus “más sentidas condolencias” a las familias.

También transmitieron sus condolencias el primer ministro, Benjamin Netanyahu, y el ministro de Defensa, Yoav Gallant. “Este es un incidente doloroso para todos los israelíes. Debemos ser resilientes y seguir la ofensiva por los rehenes, por nuestros ciudadanos y por nuestros soldados”, dijo Gallant.

Más temprano, el ejército israelí informó que había recuperado los cuerpos de tres rehenes que murieron en manos de Hamas: un civil de 28 años, Elia Toledano, secuestrado durante una fiesta en una zona fronteriza de Israel con Gaza, el soldado Nik Beizer, de 19 años, y el sargento Ron Sherman, de la misma edad. Este último era sobrino del músico argentino León Gieco, que había pedido públicamente su liberación y una salida pacífica al conflicto.

Según estima Israel, más de un centenar de secuestrados siguen con vida en manos de Hamas. En octubre fueron liberados 123 israelíes, ocho tailandeses, un nepalí, un tanzano y un franco-mexicano. Varios de los extranjeros, entre ellos los de Tailandia, se encontraban en Israel para trabajar como empleados en los kibutz.

Alertan sobre la violencia de los colonos en Cisjordania

El presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abbas, se reunió ayer con el asesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan. En ese encuentro le pidió que su país presione a Israel para que pacte un alto el fuego inmediato en la Franja de Gaza y para que también cese los ataques que el ejército y los colonos extremistas israelíes llevan adelante contra la población de Cisjordania, el otro territorio palestino. Allí no gobierna Hamas sino la ANP.

El jueves cuatro palestinos, entre ellos un adolescente, murieron por disparos del ejército israelí durante una operación militar en Yenín, en el norte de Cisjordania. A lo largo de este año, 494 palestinos murieron en hechos violentos en ese territorio, y la mayoría de esas muertes –286– ocurrieron después de los ataques de Hamas del 7 de octubre. Desde ese día, además, fueron detenidos por Israel más de 3.500 palestinos según organizaciones de Cisjordania, y más de 2.000 según números oficiales israelíes.

Abbas insistió en “la urgente necesidad de detener la actual agresión israelí, en particular el genocidio que se está llevando a cabo estos días contra el pueblo palestino en Gaza”, según un comunicado de su oficina citado por The Guardian. En la Franja de Gaza, la ofensiva israelí ya dejó más de 18.800 muertos y 50.800 heridos, además de 1,8 millones de desplazados.

El presidente de la ANP le señaló además a Sullivan que Gaza es una “parte integral” del Estado palestino y advirtió que “la separación o cualquier intento de aislar cualquier parte de ella es inaceptable”. El primer ministro de Israel ha manifestado que no permitirá que la ANP gobierne Gaza una vez que la guerra termine.

Abbas también insistió en la necesidad de “abrir todos los cruces [fronterizos], duplicar la entrada de ayuda y suministros médicos y alimentarios” a la Franja de Gaza y de “proporcionar agua, electricidad y combustible lo más rápido posible para que los hospitales y las instalaciones básicas puedan reanudarse”. De acuerdo con Europa Press, el presidente de la ANP pidió además que Estados Unidos negocie la “liberación de fondos de compensación palestinos” retenidos por Israel y que apoye la solución de dos estados.

No se hizo pública la respuesta que recibió Abbas de Sullivan, quien por otra parte se declaró “satisfecho” ayer con la decisión de Israel de abrir el paso fronterizo de Kerem Shalom para que ingrese a Gaza ayuda humanitaria, tal como había pedido Estados Unidos. De ese modo, la ayuda humanitaria tendría otra vía de ingreso, además del paso de Rafah, fronterizo con Egipto. “Esperamos que esta nueva apertura alivie la congestión y ayude a facilitar la entrega de asistencia vital a quienes la necesitan con urgencia en Gaza”, dijo Sullivan.

Condenas contra la violencia de los colonos en Cisjordania

Al igual que Abbas, varios países alertaron esta semana contra los ataques cometidos por colonos israelíes en Cisjordania, que desde octubre mataron a ocho civiles palestinos e hirieron a más de 80 en 343 ataques, además de desplazar de sus hogares a más de un millar de personas. Así lo señala un comunicado que llama a erradicar esa violencia, firmado por los gobiernos de Reino Unido, Australia, Bélgica, Canadá, Dinamarca, Finlandia, Francia, Irlanda, Luxemburgo, Países Bajos, Noruega, España, Suecia y Suiza, y las autoridades de la Unión Europea.

Los firmantes manifiestan su “grave preocupación” y condenan “rotundamente los actos violentos cometidos por colonos extremistas, que están aterrorizando a las comunidades palestinas”, según citó Efe. “Reiteramos nuestra posición de que los asentamientos de Israel en la Cisjordania ocupada son ilegales en virtud del derecho internacional y recordamos a Israel sus obligaciones bajo la legislación internacional”, agregaron.

El jueves el gobierno británico anunció que prohibiría la entrada a Reino Unido a los colonos que ataquen a la población palestina. “Los colonos extremistas, al atacar y matar a civiles palestinos, están socavando la seguridad y la estabilidad tanto de israelíes como de palestinos”, manifestó el ministro de Relaciones Exteriores, David Cameron, que pidió a Israel que tome “medidas más enérgicas para detener la violencia de los colonos y hacer rendir cuentas a los perpetradores”.