Cuando los muertos palestinos en la Franja de Gaza desde que comenzaron los bombardeos israelíes tras los ataques de Hamas del 7 de octubre del año pasado ya son casi 40.000, la posibilidad de que la guerra se expanda a escala regional parece más cercana que nunca.
Mientras este domingo autoridades palestinas reportaron que dos escuelas con centenares de refugiados fueron blanco de ataques israelíes que costaron la vida a 30 personas, Israel argumentó que allí estaban escondidos militantes de Hamas, y varios países llevan adelante contactos y negociaciones para evitar una escalada insospechada.
En ese sentido, este domingo el canciller de Jordania, Ayman Safadi, finalizó una visita a Teherán, la capital iraní, donde se reunió con su homólogo local, Ali Bagheri Kani, y también con el nuevo presidente de la república islámica, Masoud Pezeshkian.
“Jordania siempre ha sido proactiva en la defensa de la causa palestina y los derechos del pueblo palestino. Ha condenado la ocupación israelí de los territorios palestinos y ha rechazado todas las crecientes medidas de Israel que impiden lograr la seguridad, la estabilidad y una paz justa”, dijo.
Safadi condenó el asesinato del líder político de Hamas, Ismail Haniyeh, el miércoles en Teherán, calificándolo como “un crimen atroz y una escalada que constituye una violación del derecho internacional y del derecho humanitario, y una infracción de la soberanía estatal”. Sobre este último tema, el presidente Pezeshkian dijo que el asesinato de Haniyeh fue una violación del derecho internacional y “un gran error de los sionistas” que no quedará sin respuesta.
“La República Islámica de Irán espera que todos los países islámicos y los pueblos libres del mundo condenen enérgicamente esos crímenes”, afirmó Pezeshkian.
Sobre la posibilidad de que este asesinato desencadene una guerra regional, The Wall Street Journal informó que el gobierno iraní rechazó de manera contundente los llamados a la moderación planteados a Teherán por diplomáticos de países árabes. De acuerdo con el informe publicado por el diario estadounidense, las autoridades iraníes dijeron que no les importa si la respuesta de su país contra Israel desencadena una guerra.
Al respecto de esta cuestión, más de una docena de países, entre los que se encuentran Francia, Estados Unidos, Reino Unido y Turquía, les pidieron a sus ciudadanos que abandonen cuanto antes el territorio del Líbano ante el temor de una guerra regional.
Mientras tanto, en Israel se están tomando medidas ante una respuesta iraní por el asesinato de Haniyeh en su territorio, como también un ataque masivo de Hezbolá por la muerte de uno de sus principales comandantes militares, Fuad Shukr, a quien el gobierno del primer ministro Benjamin Netanyahu responsabilizó por el ataque contra la aldea drusa israelí de Majdal Shams, que costó la vida de 13 niños y adolescentes.
Medios israelíes informaron que este domingo Netanyahu mantuvo una reunión con los altos mandos militares y otros funcionarios de defensa para evaluar medidas preventivas porque todavía no saben con qué tipo de ataque se van a enfrentar. Más temprano en la tarde, de acuerdo con lo que informó la cadena qatarí Al Jazeera, el ministro de Defensa, Yoav Gallant, había realizado su propia evaluación con su equipo, que posteriormente iba a presentar a Netanyahu.
Israel tiene un sistema de defensa aérea muy complejo y efectivo, pero que no blinda por completo todo el territorio del país. Desde que comenzó el conflicto en curso, los sistemas de defensa antimisiles israelíes se vieron exigidos como nunca por la gran cantidad de cohetes que fueron lanzados contra su espacio aéreo.
De hecho, los israelíes están implementando un nuevo sistema de alerta y aviso y existen informes de que se abrieron refugios especiales destinados para funcionarios israelíes e incluso de que entre ellos se distribuyeron teléfonos satelitales para el caso de que se corten las comunicaciones.
El portavoz del ejército israelí, Daniel Hagari, dijo también que se lanzó un nuevo sistema para alertar a todos los ciudadanos israelíes en caso de cualquier emergencia. “La alerta se enviará a los teléfonos móviles de la zona amenazada. Esto se hace sin necesidad de solicitud y sin ninguna acción por parte del ciudadano”, declaró Hagari.
En paralelo, de acuerdo con lo que informó el diario israelí Haaretz, este lunes llegará a Tel Aviv el comandante Michael Kurilla, quien es uno de los responsables del Mando Central de los Estados Unidos, para discutir con jerarcas israelíes sobre el eventual ataque que lanzarán las fuerzas iraníes.