Las autoridades israelíes esperaban en la noche del viernes que el instituto forense Abu Kabir, en Tel Aviv, determinara si un cuerpo que el movimiento palestino Hamas había entregado horas antes a la Cruz Roja era el de una mujer secuestrada el 7 de octubre de 2023, Shiri Bibas.

El jueves, Hamas entregó a Israel los cuerpos de los niños Ariel y Kfir Bibas, pero el proceso de identificación genética determinó que otro cuerpo, que supuestamente era el de su madre, no correspondía a ninguno de los rehenes que se encuentran en la Franja de Gaza.

Hamas manifestó en un comunicado: “Señalamos la posibilidad de un error o solapamiento en los cadáveres, que puede deberse a que la ocupación [israelí] atacó y bombardeó el lugar donde se encontraba la familia” Bibas junto con varios palestinos.

A su vez, Israel comunicó el viernes que los niños, Ariel, de cuatro años, y Kfir, de nueve meses, no murieron en un bombardeo israelí, como anunció Hamas en noviembre de 2023, sino que sus captores los mataron “con sus propias manos”.

El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, consideró en la mañana del viernes que la entrega de un cuerpo que no era el de Shiri Bibas implicaba una “cruel y atroz violación del acuerdo” de cese del fuego y afirmó que las autoridades actuarían “con determinación” para recuperar a todos los rehenes y para que “Hamas pague el precio”. Según citó Europa Press, agregó: “Que Dios vengue su sangre. Nosotros también nos vengaremos”.

Integrantes de la familia Bibas acusaron al gobierno israelí de abandonar a sus seres queridos. “No existe perdón alguno por haberlos abandonado y haberlos relegado al cautiverio. Netanyahu, no hemos recibido siquiera una disculpa por tu parte en estos momentos tan dolorosos”, manifestó Ofri Bibas, hermana del marido de Shiri, Yarden Bibas, que también había sido secuestrado y fue liberado con vida el 1º de febrero.

La situación generó nuevas tensiones a horas de otro intercambio de rehenes vivos por palestinos encarcelados en Israel, previsto para este sábado. Un portavoz del brazo armado de Hamas, Abú Obeida, informó que entre quienes serán liberados se encuentran Avera Mengitsu, un etíope israelí que entró a la Franja de Gaza por sus propios medios en 2014 y fue secuestrado por Hamas, e Hisham al Sayed, un beduino israelí que está en la misma situación desde 2015; los dos tienen 37 años.

Según el Foro de Familias de Rehenes, ellos y otros cuatro hombres son los últimos rehenes con vida que está previsto que sean liberados en esta etapa del cese del fuego. Otros secuestrados, entre ellos militares, serían liberados en las siguientes fases del acuerdo.

Ataques en Cisjordania

Netanyahu también anunció el viernes que aumentarán las operaciones militares en Cisjordania, donde las redadas y los ataques se han vuelto más frecuentes y han dejado más de 800 muertos desde octubre de 2023. En este caso, dijo que esta decisión se debe a que en la noche del jueves explotaron tres ómnibus en Tel Aviv, en una acción que Israel atribuye a milicianos palestinos de Cisjordania. Las explosiones ocurrieron en un estacionamiento y no dejaron víctimas.

“Estamos entrando en los bastiones terroristas, arrasando y eliminando a los terroristas”, dijo el primer ministro israelí desde el campo de refugiados de Tulkarem, en ese territorio palestino. Junto a él, el ministro de Defensa, Israel Katz, dijo que “todo implicado en actos de terrorismo será eliminado”.

Se dirigió públicamente a los palestinos que estaban detenidos en cárceles israelíes, muchos de ellos sin condena, y algunos menores de edad, que fueron liberados a cambio de los rehenes de Hamas. “Advierto a los terroristas que fueron liberados [...]: nuestros ojos están puestos en ustedes y perseguiremos y eliminaremos a todo implicado en actos de terrorismo”, dijo.