El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, amenazó este domingo a los hutíes de Yemen y a Irán después de que un misil balístico lanzado desde el territorio yemenita estallara en el predio del aeropuerto Ben Gurión, situado cerca de Tel Aviv, la principal terminal aérea de Israel.
Netanyahu declaró en un video publicado en Telegram que Israel ya ha actuado contra este grupo en el pasado y que “lo hará en el futuro”. “No será de un solo golpe, sino que habrá muchos golpes”, advirtió el primer ministro, sin dar más detalles.
Posteriormente, en un mensaje publicado en su cuenta de X, Netanyahu afirmó que “los ataques de los hutíes provienen de Irán” y que Israel responderá “en el momento oportuno”. La acción de los rebeldes de Yemen, que cuentan con el apoyo iraní y que controlan parte del país, incluida la capital, Saná, causó heridas a seis personas, aunque ninguna de ellas de gravedad.
Según un comunicado de los hutíes difundido por la cadena de televisión afín Al Masirah y consignado por agencias internacionales, el ataque se realizó con “un misil balístico hipersónico que alcanzó su objetivo con éxito”.
Fuentes militares israelíes confirmaron que el proyectil había sido lanzado desde Yemen, país situado en el suroeste de la península arábiga, a más de 1.800 kilómetros de Israel.
Un portavoz de la autoridad aeroportuaria israelí declaró que esta fue “la primera vez que un misil cae tan cerca de la terminal y de las pistas de aterrizaje”. El ataque causó retrasos en los vuelos y varias aerolíneas no retomarán sus operaciones normales en los primeros días de la semana.
Tras una investigación preliminar, el ejército de Israel afirmó que la imposibilidad de detener al misil disparado desde Yemen se debió a un problema técnico con el proyectil lanzado para interceptarlo, según informó el diario israelí Haaretz.
El ataque se produjo unas horas antes de que el ejército de Israel anunciara que convocó a “decenas de miles de reservistas” para intensificar su ofensiva en Gaza, con el objetivo de destruir todas las infraestructuras de la organización islamista Hamas.
Pero, en concreto en la Franja de Gaza, la destrucción va bastante más allá de las instalaciones de Hamas, ya que que gran parte del territorio está completamente destruido.
Los permanentes bombardeos sobre diferentes partes del enclave causan decenas de muertes diarias y, además de los ataques, el bloqueo de ayuda humanitaria dispuesto por el gobierno de Netanyahu está produciendo una situación de hambruna generalizada.
Si bien las muertes contabilizadas oficialmente son más de 52.000 desde que comenzó la guerra en octubre de 2023, se estima que el número real de víctimas es bastante superior, en el marco de una crisis humanitaria que aumenta cada vez más, en medio de la falta de insumos de todo tipo.
En este contexto, este domingo la cadena qatarí Al Jazeera informó, con base en fuentes cercanas a Hamas, que la organización palestina ejecutó esta semana a varios presuntos saqueadores tras incidentes en los que bandas fuertemente armadas atacaron tiendas de alimentos y comedores comunitarios en la Franja de Gaza.
Por otra parte, el aumento de la operación por tierra en el territorio palestino provocó una advertencia por parte del jefe del Estado Mayor del ejército israelí, Eyal Zamir. De acuerdo a lo que informó el canal 13 de la televisión israelí, en los últimos días Zamir advirtió a los ministros que Israel “podría perder” a los rehenes en Gaza si lanza una operación importante en la Franja.
“En un plan para una maniobra a gran escala, no necesariamente alcanzaremos a los rehenes”, expresó el militar. “Tengan en cuenta que podríamos perderlos”, afirmó Zamir, y agregó que los dos objetivos de la guerra, derrotar a Hamas y rescatar a los rehenes, “son problemáticos entre sí”.
El diario The Times of Israel recordó que las familias de los rehenes que siguen cautivos en Gaza, que en total son 59, de los cuales se presume que 24 siguen con vida, llevan mucho tiempo argumentando esto, pero los líderes políticos, incluido Netanyahu, se mantienen en la postura de que la presión militar ayudará a alcanzar un acuerdo para el retorno de los rehenes.
En respuesta a los comentarios realizados por Zamir, el Foro de Rehenes y Familias Desaparecidas expresó en un comunicado: “La advertencia del jefe del Estado Mayor debería quitarles el sueño a todos los israelíes. Una abrumadora mayoría de la nación está unida en el entendimiento de que no se puede lograr una victoria israelí sin traer a los rehenes a casa. Perderlos significaría una derrota israelí. La seguridad nacional y la estabilidad social dependen del regreso de todos los rehenes, hasta el último”.