
Sociedad
Cortar por lo sano
Cerca de diez médicos, vestidos con túnicas y acompañados por algunos funcionarios de la Fundación Peluffo Giguens (FPG), ocupaban ayer la larga mesa de reuniones del Sindicato Médico del Uruguay (SMU). Con tono sereno, que estaba en sintonía con las caras pensativas y aplacadas que lo rodeaban, Luis Alberto Ney Castillo, jefe de servicio de la FPG, anunció la renuncia del equipo médico a los cargos en la fundación que atiende a niños con cáncer. La posible salida al conflicto instalado es crear otro proyecto, al que se sumarán los funcionarios no médicos de la institución.