Los primeros 100 días de esta administración fueron especialmente fecundos en casos de jerarcas cesados de sus cargos por decisiones o declaraciones poco felices. Pero además de los casos que se hicieron notorios, hubo otros que no tuvieron tanta repercusión. A continuación se citan algunos de ellos. Los nombres de los implicados son ficticios para no perjudicar sus posibilidades de reinsertarse en el mercado laboral.

Carlos G

Este empresario estudió administración en una universidad privada local y luego obtuvo un BA en la Universidad de Yale en management operacional, un MBA en corporate business en la Universidad de Stanford y un MVP en el All Star’s Game de la Liga de Básquetbol Gerencial de Estados Unidos. Fue convocado por el presidente Luis Lacalle Pou para encabezar una división del Sistema de Responsabilidad Penal Adolescente que se ocupa de cuestiones sanitarias, como el combate a las plagas de ratas y cucarachas en las celdas, las epidemias de sarna entre los internos y el reciclaje de los alimentos en mal estado. A poco de asumir participó como ponente en la mesa redonda “Oportunidades de negocios digitales en las economías emergentes” de la Universidad de Montevideo, y durante su intervención afirmó: “En el Sirpa hay unas pendejitas de 15 años que están que se parten”. Fue cesado antes de que el escándalo pasara a mayores.

Laura J

Tras varios días de negociaciones en la interna de la “coalición multicolor”, esta emprendedora en el rubro de la moda y militante del sector colorado Ciudadanos que dio sus primeros pasos en política a mediados de octubre de 2019, entre la primera y la segunda vuelta de las elecciones, fue designada para ocupar un cargo de responsabilidad en el área de apoyo a las personas con discapacidad que viven en asentamientos irregulares del Ministerio de Desarrollo Social. A pesar de que la experiencia de Laura J en gestión pública se limitaba a haber trabajado una hora y media en un puesto de venta de tortas en una kermés de apoyo a la escuela pública del barrio de una de sus criadas, desde Ciudadanos consideraron que el know how adquirido como gestora de su boutique en Pocitos la convertía en una candidata ideal para ocupar ese cargo. A mediados de mayo instaló un par de máquinas de coser en su despacho para que cinco ciudadanas bolivianas elaboraran allí prendas de ropa para su boutique. Cuando el caso se destapó, Laura J argumentó que no podía dejar trabajando solas en el taller a sus empleadas, ya que venían de un país “con otra cultura y otras costumbres”. Ernesto Talvi le pidió la renuncia y justificó la decisión afirmando: “Laura es una excelente emprendedora, una gran compañera y, sobre todo, una maravillosa persona, pero a veces su pasión por la responsabilidad social empresarial le hace perder perspectiva”.

Horacio N

Cabildo Abierto (CA) siempre defendió la teoría de que los cargos de confianza en la administración debían ser ocupados por las personas más capaces, más allá de su ideología. Seguramente por esto es que a los liderados por Guido Manini Ríos no se les pasó por la cabeza revisar los antecedentes ideológicos de este productor rural de Soriano. De haberlo hecho hubieran descubierto que hace 25 años Horacio N participó en la fundación de la primera organización neonazi antihitleriana del mundo. Estos seguidores del nacionalsocialismo consideraban que Adolf Hitler fue un líder blando y de poco carácter, responsable del fracaso del Tercer Reich, y que demostró una total incompetencia a la hora de eliminar a los banqueros judíos de la faz de la tierra. En marzo, el militante de CA fue destinado a una oficina del Consejo de Educación Inicial y Primaria que se encarga de la compra de material didáctico para niños de dos a cinco años. “La esvástica es un símbolo utilizado por muchas civilizaciones desde hace miles de años, no tiene nada que ver con el nazismo”, aseguró el novel jerarca cuando se supo que había mandado comprar 1.000 cuadros con este símbolo para adornar los jardines de infantes de todo el país. La explicación de Horacio C resultó más que convincente para las autoridades de CA, pero consideraron que el episodio no se iba a ver bien ante la opinión pública, así que le pidieron la renuncia de todas formas.