Nacido en el entonces imperio austro-húngaro en 1906, Samuel Billy Wilder fue uno de los millones de emigrantes que llegaron a Estados Unidos huyendo de la turbulenta Europa del período de entreguerras, y terminó siendo uno de los principales nombres del cine estadounidense del siglo XX.

Ahora, y siguiendo con su revisión de clásicos, el Auditorio Nelly Goitiño le dedica un ciclo que comienza el lunes con dos de los films guionados por Wilder y dirigidos por otro inmigrante legendario, el alemán Ernst Lubitsch. Todos son considerados obras maestras. A las 18.00 se proyecta la comedia política Ninotchka (1939), con Greta Garbo y Melvyn Douglas, y a las 20.00 otra comedia romántica (la gran especialidad de Wilder), protagonizada por Gary Cooper y Claudette Colbert, La octava mujer de Barba Azul (1938).

En las próximas semanas el ciclo continuará con películas dirigidas por Wilder como Pacto de sangre, Días sin huella, Una Eva y dos Adanes, La comezón del séptimo año y otros clásicos de su tiempo.