Más de 20 artistas en un mismo día y en un solo lugar: el Auditorio del SODRE. Pero no se asusten, no hay demasiadas posibilidades de empacharse ―a menos que algún espectador logre el milagro metafísico de estar en cinco escenarios al mismo tiempo―. No queda otra: hay que elegir. Por ejemplo, para los que andan gustosos del rock nacional de todas las horas, tendrán a La Triple Nelson en el escenario Fabini, a las 20.30. El power trio liderado por la entusiasta voz de Christian Cary y sus bluseados punteos ya lleva 20 años en la movida, y su último disco, La sed (2015), es un buen compendio de todo lo rockero que saben hacer.

Alberto Mandrake Wolf será el postre del escenario Patricia, a las 22.00. Pero no estará solo sino con su nueva banda, Los Druidas, con la que cultiva un sonido más vintage, que verá la luz con un disco en las bateas antes de que termine el año. Por otro lado, al escenario Trovadores lo abrirá el inefable Riki Musso, a las 16.00; hará de la suyas solistas, como “Pájaro Batman” y todas las del genial Formidable! (2014) ―y seguramente alguna de las que firmó con El Cuarteto de Nos, como “Sólo soy un polaco enamorado”―. El plato rockero se terminará de redondear con Chillan Las Bestias, la banda argentino-uruguaya liderada por Pedro Daltón, que lustrará su Premio Graffiti recién ganado por su disco homónimo, como mejor álbum de rock y pop alternativo, en el escenario Patricia a las 18.15.

Los que gustan de la electrónica y sus infinitas variedades ―que, por supuesto, incluyen ingredientes pop― se harán la tarde con Santé Les Amis, a las 17.45 en el escenario Fabini. El grupo rompió todos los esquemas con Sudamericana (2012), un álbum electropop que tiene su correspondiente disco de remixes y versiones y del que salió el primer tema uruguayo para el videojuego FIFA ―en su edición de 2015―, “Brasil”. El mismo escenario lo cerrará Campo, el proyecto de Juan Campodónico, que anda con el fresquito Tambor del cosmos (2017), en el que sigue jugando con los géneros a placer, como lo demuestra el seudoreguetón “Bailar quieto” (lindo oxímoron).

Para los evangelistas del pop ―a secas o con el guión “rock”― también hay. Desde la frescura inocente de Papina de Palma (17.30 en el escenario Trovadores), pasando por los tintes folk de Nicolás Molina (mismo escenario, 20.15), hasta el rock devenido en electrodance de Boomerang (para muestra, escúchese “No me parece mal”, el adelanto de su nuevo disco), que sonará a las 20.45, antes que Mandrake. Por supuesto, no va a faltar el hip hop, con Eli Almic-Dj RC, Los Buenos Modales y Groove Retórica.

Habrá más artistas, pero ya no da la página ―y desentonaría un poco seguir en la cartelera de cine―. Por último, los datos de rigor: las entradas están a la venta por Tickantel y locales de RedPagos. Las generales valen $1.200 y las VIP $1.800 (estas incluyen acceso preferencial a salas, entrada a la zona lounge y tres consumiciones de regalo).