Del 4 al 31 de enero se desarrollará una nueva edición del Programa Fortalecimiento de las Artes, organizado por el departamento de Cultura de la Intendencia de Montevideo, en coordinación con la Sociedad Uruguaya de Actores y la Federación Uruguaya de Teatros Independientes. Esta vez, el Festival de Teatro presentará 20 espectáculos nacionales en la sala Verdi y en el centro cultural Florencio Sánchez (habrá un ómnibus a disposición del público para facilitar el traslado al Cerro), con entrada libre.

Hoy y mañana, en la sala Verdi se presentarán:

» El ilustrador, de Damián Barrera (15.00, con Susana Anselmi y Emanuel Sobré). Un solo ilustrador es el responsable de dibujar todos los libros del mundo, hasta que un día, a causa de un descuido, un dibujo le roba el lápiz y lo esconde dentro de un libro.

» Cabrerita (20.30). Clásico dirigido por Eduardo Cervieri y protagonizado por Carlos Rodríguez que repasa la vida de Raúl Cabrera Alemán (1919-1992), conocido como Cabrerita: un artista que vivió al margen y que se enfrentó a un largo derrotero entre asilos y hogares adoptivos, con una vocación indeclinable hacia la poesía y la pintura que las prolongadas internaciones psiquiátricas no lograron aplacar. Después de vivir un tiempo en la calle, se llegó a un acuerdo con el director del hospital Vilardebó para que pudiera quedarse allí. Al tiempo, cuando cambió la dirección del hospital, lo derivaron a la Colonia Etchepare, donde estuvo recluido más de tres décadas en condiciones muy precarias y regaló cientos de sus dibujos y acuarelas.

En la semana, la sala céntrica recibirá a La refinada estética de los hijos de puta y Lítost, de Jimena Márquez, y Querido Mario, de María Varela.

El fin de semana siguiente el centro cultural Florencio Sánchez acogerá tres espectáculos:

» Si muriera esta noche. Una obra sobre la vida y obra de Idea Vilariño, escrita e interpretada por Raquel Diana y dirigida por María Clara Vázquez. Este espectáculo se creó a partir de diarios, cartas, entrevistas y textos de Idea, para homenajear así a su “poderosa voz poética” y a “la intelectual exquisita que también opinó sobre lo político y social”. Junto a estas fuentes, Raquel Diana se inspiró en lo recopilado en Idea Vilariño: la vida escrita (2007), el logrado libro de Ana Inés Larre Borges en el que se recogen testimonios y valoraciones de referentes de las letras hispanoamericanas, junto a fragmentos de textos, cartas y diarios.

» Y al Guille, ¿quién lo cuida?, de José Pablo Rivoir. Una propuesta teatral de títeres “gigantes y canciones originales”, que apunta a concientizar sobre que ser cuidado es uno de los derechos fundamentales del ser humano.

» Cosas de titiritero, de Daniel Ovidio Fernández. Un titiritero ambulante confirma que llega tarde a un encuentro y descubre que su compañero ya no está. Frente a la ausencia, se siente avergonzado, inventa excusas y se lamenta, confesando que tiene historias que contar, pero, como no lo puede hacer solo, le pide ayuda al público para narrarlas, convirtiéndolo en titiritero y protagonista.