¿Adivinen qué? Tenemos que hablar de un nuevo servicio de televisión a demanda que desembarcó en nuestro país. Si en este momento están experimentando una sensación de déjà vu, no es debido a un error en la Matrix (la Matrix fue desfragmentada hace unos días y está funcionando a la perfección). Es que, cual territorio mesoamericano a comienzos del siglo XVI, hemos tenido bastantes desembarcos en los últimos tiempos.

En esta ocasión estamos ante uno de los pesos pesados, porque Star+ no es otra cosa que la pata adulta, o al menos “no tan familiar” de Disney+. Y ambas conforman la oferta de películas y series de televisión de una de las empresas de entretenimiento más grandes del planeta Tierra (hasta el signo de más parece una redundancia).

Para hacer más amigable el repaso, sobre todo después de tantas plataformas repasadas, el asunto estará dividido en categorías. Vayamos a por ellas.

La aplicación

Si están suscriptos a Disney+ y la han utilizado lo suficiente, no tendrán problemas para sumergirse en esta plataforma. Tiene una interfaz muy similar, con una diferencia que deberían corregir (en alguna de las dos). Para acceder a la lista de contenido favorito, en Star+ hay que ir al signo de más, justamente, mientras que en Disney+ “mi lista” se halla dentro del perfil. Punto para Star+, aunque todavía no termino de acostumbrarme.

En general la navegación es sencilla, con las tres grandes categorías accesibles en lo más alto: Películas, Series y ESPN. Ahondaremos en cada una de ellas, pero puedo adelantarles (spoiler alert) que una de ellas es el talón de Aquiles de la aplicación. Quizás por tratarse del contenido más original, que ni siquiera ofrece su competencia directa, el acceso a los deportes es un poco más confuso. O capaz que soy yo. Seguramente sea yo.

Las series

El principal gancho de este servicio trabaja en una central nuclear, su piel es de color amarillo y tiene cuatro dedos en cada mano, aunque estas dos últimas características no son consecuencia de la primera. Homero Simpson, protagonista máximo de Los Simpson desde que le quitó esa distinción a su hijo mayor, desembarcó con 32 temporadas completas. Otro día podremos discutir cuántas de ellas son dignas de alabanzas; las que sean, están disponibles.

Continuando con series creadas por Matt Groening, hay que mencionar la presencia de los 140 episodios de Futurama. Que, si me preguntan a mí, les digo que en promedio la serie es mejor que su antecesora. Y si no me lo preguntan, también se lo digo.

Para cerrar el bloque animado, tenemos la primera oportunidad de ver en forma legal la bien ponderada Bob’s Burgers, además del combo de Seth MacFarlane: Family Guy, The Cleveland Show y American Dad.

En la categoría que podríamos denominar “clásicos”, Star+ incluye títulos como Lost, Los Archivos X, Desperate Housewives, Scrubs y Buffy la cazavampiros. Más cercanas en el tiempo, pero igual de aclamadas, son las series Modern Family, Atlanta, This Is Us, Homeland y Pose. Y no quiero olvidarme de The Walking Dead, que no-vive y lucha.

Con la promesa de más material original (hay que prestarle atención a Only Murders in the Building), tenemos una oferta suculenta, bastante más amplia que la de Disney+.

Las películas

El catálogo de films también es nutrido, ya que reúne las obras de estudios como Touchstone Pictures, Searchlight Pictures y 20th Century Studios. En este caso recomiendo “perder” unos minutos navegando por las categorías que se encuentran dentro de este apartado, que son tan intuitivas como las del apartado de series.

Entre los títulos que llegan destacados por la propia aplicación se encuentran Nomadland, última gran ganadora del Oscar, las sagas de Alien y Depredador, las películas “adultas” de personajes de Marvel (como Deadpool y Logan) y la deliciosa Jojo Rabbit. En lo personal, agregaría a la lista de recomendaciones media docena de films de Wes Anderson, las primeras tres entregas de Duro de matar, Borat, Loco por Mary y Wilson. En cuanto a material local, podemos disfrutar de Así habló el cambista.

Revisen, y si se topan con Bañeros 5 actúen con responsabilidad.

El deporte

Este es un elemento fundamental del servicio, que lo separa de toda la competencia. Aquí tenemos una oferta no solamente de retransmisiones, sino de eventos deportivos en vivo. Sin embargo, la forma de presentar el material de ESPN es poco amigable, al menos para mí.

Lo que abunda en este apartado son recordatorios de cosas que algún día sucederán. Tendremos que revisar las fechas y si ese partido de fútbol o de tenis, esta carrera de Fórmula 1 nos interesa, y será cuestión de agregarla a nuestra lista. Pero a las secciones por deporte o por competencia sería bueno sumarles una que mostrara las actividades por día. Si me están leyendo, señores programadores, es por ahí.

El precio

Este es el asunto del millón. Bueno, del millón si pagáramos unos 7.700 años por adelantado. Star+ tiene un precio mensual de 13 dólares, igual al que ofrece Netflix en su tarifa “estándar”, con hasta dos pantallas en simultáneo (por una pantalla sola, la empresa cobra nueve dólares, mientras que su tarifa “Premium” asciende a 16 dólares). Claro que Netflix apuesta en forma casi obsesiva a la programación original, estrenando decenas de títulos (entre series y películas) por semana.

Si de calidad se trata, la ventaja es para Star+, sin dudas. Pero aquellos que busquen variedad, o que ya hayan visto en cine y televisión lo que ofrece, tendrán que ser pacientes para esperar grandes cambios en su catálogo. Otra ventaja es que abonando un año entero la tarifa se reduce a 130 dólares.

Por último, se nos ofrece la opción de Combo+, donde por 17,50 dólares mensuales accedemos a Disney+ y Star+. Tres dólares menos que el precio por separado.

Veredicto

Epa, cuánta presión. La más reciente plataforma de televisión a demanda incluye un catálogo mayor que el de varias de sus competidoras (como Paramount+ o Prime Video), aunque, al igual que Disney+, no apuesta a una avalancha de nuevo contenido original.

Mientras esto siga así, y con el precio al que llegó al mercado, será fundamental la importancia que sus potenciales clientes le den al deporte. Si piensan aprovechar ESPN, la ecuación es más sencilla. Ante la duda, les recomiendo visitar a algún pariente o amigo que la tenga y revisar un rato el catálogo. Que la visita sea con cuidados sanitarios, por favor.