Aunque fue un actor de teatro y siempre declaró su amor incondicional por las tablas, Rodolfo Bebán (1938-2022) se hizo famoso en televisión. Debutó con un personaje principal en El amor tiene cara de mujer, de Nené Cascallar, para seducir a Bárbara Mujica. Eran los años 60 y la telenovela argentina vivía años de oro. En los años siguientes fue parte del ciclo de unitarios Alta comedia y uno de los galanes de Cuatro hombres para Eva, pero su gran éxito llegaría en 1972 con Malevo, la tira de Abel Santa Cruz que alcanzó picos de audiencia a la hora de la cena y que le permitió conocer al gran amor de su vida, Gabriela Gili, una rubia de ojos muy abiertos y claros con la que vivió durante casi 20 años –hasta que ella murió de un ataque cardíaco– y tuvo tres hijos. Había tenido antes una hija con la modelo brasileña Liz Amaral y dos hijos con la actriz Claudia Lapacó, con la que estuvo casado y convivió durante seis años.

La historia dice que llegó a la actuación por casualidad, porque en su casa no se hablaba de teatro. Su padre, Domingo Miguel Tili, que había dejado el hogar, era un actor conocido como Miguel Bebán. De él tomaría Rodolfo el apellido una vez consolidado en la profesión. Empezó en una versión de Fuenteovejuna y ya nunca dejó de hacer teatro, aunque las exigencias de la televisión lo reclamaban durante largas jornadas. “Mi gran amor es el teatro. Nací y me crié en él. Cuando no lo hago, lo extraño. Sin embargo, tengo que reconocer que la televisión es la que me dio notoriedad y la posibilidad de grandes trabajos. No puedo escupir contra el viento”, dijo en una entrevista citada por el diario argentino La Nación.

Fue gracias a su popularidad en televisión que Leonardo Favio lo llamó para hacer el protagónico de Juan Moreira, que se estrenó en 1973 y fue un gran éxito. Durante las décadas siguientes trabajó en teatro, cine y televisión aunque cada vez en forma más esporádica. Su última aparición en la pantalla chica fue en 2014, en la telenovela Camino al amor.

Bebán murió el sábado, a los 84 años, en el residencial en el que vivía desde hacía ya un buen tiempo. La noticia fue confirmada por la Asociación Argentina de Actores y rápidamente llegó a todos los medios en la vecina orilla.