Muchos músicos de jazz –y de otros géneros– cargan con la pesada herencia de sus maestros y la rígida academia puede moldear parte de su primera personalidad. Pero a veces las apariencias engañan.
Decidido, aunque cauto, el pianista, compositor y arreglador Darwin Silva camina serio hasta llegar a su piano y el público en la sala puede apreciar su prolija camisa, su pantalón pinzado y sus zapatos lustrados, su adecuada postura vertebral y la tensión en sus músculos a la hora de proceder con gran concentración y habilitar la fina motricidad de sus manos sobre las teclas del instrumento.
Al instante en que empieza a tocar, sin embargo, toda formalidad se desvanece en un caos demasiado repentino. Sólo se puede seguir las notas sin tratar de entender qué acaba de pasar. Conviene dejarse llevar. Su estilo se podría definir como ritmo líquido y constante que toma, entre las clásicas, las formas más inverosímiles; su prestancia como instrumentista le permite, aun en sus momentos de mayor heterodoxia, construir melodías y ritmos propios de un lugar amable y armonioso. La sensación se podría asemejar a la que experimenta el pasajero de un avión cuando, por fin, el veloz pájaro mecánico vuela en silencio y sin turbulencias, con nubes y fragmentos de cielo a su alrededor.
Aquella noche de marzo en la sala Nelly Goitiño, Silva casi no habló. Tocó sus melodías de forma magistral y eligió algunas de piezas preferidas, como la arriesgada “Hiperdombe” y una versión de “Muy lejos te vas”, de El Kinto.
Darwin Silva viene de una familia de leyendas negras del candombe; estudió con Alberto Magnone y Élida Gencarelli y tocó durante años junto al bajista Popo Romano. Tiene un disco de su proyecto Darwin Silva Jazz y Candombe Big Band, En segundo plano, que en 2019 ganó el Premio Graffiti a mejor álbum de candombe.
Este sábado se presenta en la sala Vaz Ferreira del Auditorio Nacional del Sodre “con una selección de arreglos originales para piano solo de grandes creaciones de la música popular uruguaya”. Su espectáculo se llama Música popular uruguaya en primer plano y el artista nos adelanta detalles de su repertorio para esta noche: “Voy a incluir algunas composiciones propias y un repertorio cuidadosamente seleccionado; mi búsqueda así exige”.
“Podrán escuchar versiones de autores como Jaime Roos, Ruben Rada, Eduardo Mateo, Popo Romano, Alfredo Zitarrosa y Rossana Taddei. Me propongo, en cada arreglo, alcanzar diferentes climas, abrir puertas desde el plano musical que lleven a un viaje sonoro que deje volar la imaginación”, promete el talentoso músico uruguayo.
Darwin Silva en la sala Vaz Ferreira de Sodre. Este sábado a las 20.00. Entradas en Tickantel a $ 400. Invitado especial: Fede Vaz (en armónica).