En 2022 se estrenó en Max (cuando todavía tenía el HBO adelante) una serie extraña llamada El ensayo, que comenzaba con una premisa simpática: “¿No te gustaría poder ensayar una conversación antes de tenerla o averiguar cómo sería la consecuencia de una decisión importante antes de tomarla? Hay una persona dispuesta a ayudarte, sin importar el presupuesto”.

Esa persona era Nathan Fielder, bastante desconocido para la mayoría de los uruguayos, quien desde el primer episodio demostró que no estábamos preparados para su forma de pensar. Al entrevistar al primer ensayista en su apartamento, le revelaba que esa misma entrevista había sido ensayada con un actor haciendo de él en una copia exacta de su apartamento. ¿Por qué? Porque puede, claro.

Durante la primera temporada vimos también la copia exacta del bar en el que se daría la conversación que preocupaba al primer ensayista, una casa en la que se ensayaba la maternidad con la ayuda de un montón de niños actores que iban rotando para mostrar un nacimiento acelerado. En medio de todo eso, Fielder analizó sus sentimientos hacia la posible madre y especialmente hacia uno de los niños actores, que se creyó demasiado lo que estaba ocurriendo.

Allá, en Estados Unidos, Fielder ya tenía su fama, en especial por un programa emitido entre 2013 y 2017 en el que había demostrado su capacidad para lidiar con “personas reales”, organizar planes delirantes y sorprender a cada paso. Una serie que parece ser el paso previo perfecto a El ensayo (The Rehearsal), pero que recién estuvo disponible en la región hace pocos meses gracias a Paramount+.

Su nombre era Nathan For You y, si todavía no vieron la otra, la recomiendo como puerta de entrada. Porque, para empezar, es una serie mucho más fácil de explicar y recomendar. Todo comienza con Fielder dispuesto a ayudar a algún comerciante de Los Ángeles cuyo negocio no atraviesa su mejor momento. Es gente dispuesta a arriesgar, y decir que las sugerencias del conductor para mejorar el desempeño económico son riesgosas es quedarnos cortos.

A una heladería puede sugerirle un “helado de caca” (comestible) como forma de llamar la atención. A un Papá Noel de los shoppings le propone sacar fotos a mitad de precio a mitad de año, aunque para ello tengan que colarse en una plaza de comidas. A un local de suvenires le construye una falsa filmación alrededor y recluta transeúntes para ser actores, con la condición de que como parte del papel compren productos de ese comercio. Todo terminará en un delirante festival de cine.

Con una locución y conducción que nunca se hace cargo del chiste, Fielder intercala una gran cantidad de casos, y esta es otra ventaja que tiene sobre The Rehearsal. Si el caso no te resulta interesante, ocho o diez minutos después habrá uno nuevo. E intercalados en las cuatro temporadas habrá episodios especiales, incluyendo un desafío televisivo en el que Fielder deberá demostrar sus conocimientos de escapismo (que hasta ese episodio no tenía) para liberarse de unas esposas antes de que unos brazos robot programados para bajarle los pantalones lo dejen desnudo delante de un montón de niños. Junto a los niños hay un policía preparado para arrestarlo si no lo logra.

Con el correr de los episodios iremos descubriendo personajes especiales, como el guardia de seguridad que se distrae cuando ve mujeres con pechos grandes (no pregunten), un detective privado o el juez retirado al que Nathan le consulta todas sus dudas legales. Así construye un pequeño universo en el que, además, se va consolidando como personaje solitario con dificultares para conectar con el sexo opuesto. ¿Será verdad o será mentira? Es mejor no preocuparse por eso; Nathan For You es un programa en el que el “cómo lo hicieron” es un pensamiento que genera distracción.

No todas son buenas. Hay un dato que no es menor y que la serie no reconoce en forma explícita. La gran mayoría de los comercios en desgracia están en manos de primeras generaciones de inmigrantes, que no tienen al inglés como lengua materna y que en ocasiones tienen dificultades para hacerse entender o para discutir los planes con Fielder. No es que la producción se aproveche de ellos por su origen, pero hay una mayoría absoluta de comerciantes que merecería una mínima reflexión de parte del programa.

De todas formas, estamos ante un entretenimiento capaz de generar carcajadas, y en caso de quedarse con ganas pueden continuar viendo El ensayo, que a esa altura les resultará mucho más digerible que cuando se estrenó.

Nathan For You, cuatro temporadas con episodios de 21 minutos. En Paramount+.