Este sábado y los dos siguientes, en el nuevo espacio cultural La Incorrecta, ubicado en el barrio Palermo, la compañía de teatro para la infancia Ibirapitá estrenará la obra Ese miedo también es mío, dirigida por Leticia Magallanes y Romina Capezzutto. Entre otros trabajos, en 2021 y 2022 Magallanes participó en la obra De puertas abiertas, que llevaba a las tablas la experiencia escolar cooperativa que llevó adelante el director José Pedro Martínez Matonte en la década de 1960.

Este miedo también es mío es una obra pensada para llevar a las escuelas y se centra en temas relacionados con la salud mental y en la importancia de la amistad. En torno a las historias de los tres protagonistas, Juana, Lola y Franco, en diferentes etapas de su vida, con el lenguaje musical como recurso expresivo, es la ópera prima del colectivo teatral conformado por Magallanes, Capezzutto y María Victoria Parada. El elenco está integrado por Matteo Pistoni, Malena Urrutia y Fiorella Cerrone, y el diseño y la técnica escénica están a cargo de Eugenia Ciomei.

“En 2024 empezó a surgir con fuerza la idea de crear un colectivo de extensión escolar con mi amiga y codirectora del proyecto, Romina Capezzuto. Le pusimos Ibirapitá porque es el árbol que simboliza a las escuelas públicas del país, aunque en este caso tiene que ver con el sentimiento profundo que nos quedó del proyecto De puertas abiertas: el maestro Martínez Matonte plantó un ibirapitá a su hija en la puerta de la escuela 157 de Villa García”, cuenta Magallanes a la diaria sobre la génesis del colectivo.

El proyecto de las dos jóvenes actrices y directoras se inscribe en una extensa tradición que relaciona el teatro con la escuela como una forma de vínculo de niñas y niños con esta expresión artística. “Como homenaje y como aprendizaje que me dejó esa experiencia, y sin dudas también como docente, sentí la necesidad de acercar a las aulas un proyecto uruguayo con obras, historias uruguayas, escrita por nosotras por y para las infancias, con temáticas actuales y necesarias”, explica, y desarrolla sobre la importancia del vínculo entre teatro y escuela: “No todos los niños y niñas acceden al teatro; incluso docentes (maestros y maestras) nos han comentado que no tienen un acceso al teatro con facilidad, y, si no instalamos esa cultura ahora, es difícil que ellos y también nosotras como referentes educativas instalemos el teatro desde el inicio como algo fundamental para el desarrollo. Ibirapitá quiere llegar a todos los centros educativos formales y no formales”.

Foto: Natalia Bajarlia, difusión.

Foto: Natalia Bajarlia, difusión.

Hoy estrena hoy

Magallanes entiende Ese miedo también es mío como parte de un proceso, estrechamente ligado al camino transitado. “Cuando nos pusimos a pensar en qué temática queríamos trabajar, luego de haber abordado en su momento, con la obra anterior, la dictadura militar y su primer acercamiento a las infancias, entendimos que era necesario seguir en línea con nuestra forma y nuestras ideas: trabajar temáticas que incomodan, pero que terminan siendo fundamentales. Aunque esta es bastante distinta a la anterior, mantiene en el fondo y en el trabajo hecho la misma profundidad”, reflexiona.

Con respecto a la decisión de abordar el tema de la salud mental, la directora relata: “Vemos como docentes muchos niños y niñas con medicación temprana, con muchos diagnósticos, algunos claros y otros no tanto, pero es algo poco conversado colectivamente. Hay mucha soledad y silencio detrás de esos diagnósticos, sobre todo entre los adultos”. Señala, asimismo, que este panorama está presente en las escuelas como un desafío que no es fácil de afrontar: “Docentes que se enfrentan a situaciones que no saben cómo abordar, porque no siempre tenemos los elementos. Visualizamos en los niños y niñas que lo viven con una naturalidad digna de su sabiduría y que el peso viene de nosotros, los adultos también desbordados”. En ese contexto, “esta obra intenta mostrar cómo lo viven los y las niñas (¡y también los adultos de la obra!)”, dice. “Lo hacemos con mucho respeto, creo que es bueno aclararlo, y a pesar de ser una ficción, está basada en experiencias personales”, comenta, y destaca sobre el anclaje del texto: “Lo que me ha ayudado y escuchado mi prima Ivannah, psiquiatra pediátrica y mamá, en este proceso, entre otras profesionales, compañeras docentes en esta creación”.

Foto: Natalia Bajarlia, difusión.

Foto: Natalia Bajarlia, difusión.

Desde y hacia la escuela

La obra se estrena este sábado y se podrá ver también los dos siguientes en la sala de La Incorrecta, pero la idea es llevarla a los centros educativos. Este objetivo de trashumar para acercarse a su público determina sus características: “Ese miedo también es mío no tiene grandes pretensiones, aunque la temática así lo parezca. No tenemos grandes escenografías ni grandes despliegues. El objetivo es claro: es una obra que quiere moverse”, define Magallanes. Pero no sólo esa intención de girar está en el centro: la obra encuentra su origen en lo que ocurre en una escuela. “El tema que atraviesa la obra y del que hablamos anteriormente les toca a Juana, Franco y Lola, tres niños que se encuentran en el inicio de todo, en la escuela Ibirapitá del barrio Paso de las Duranas. Franco y Lola tendrán que integrar a Juana, una niña con características especiales (y muy tierna) que llega a la escuela por primera vez y les presenta desafíos a sus nuevos compañeros”, explica Magallanes, y desarrolla: “Es una obra que también habla sobre la amistad, sobre aquellas primeras amistades de la infancia, donde todo es nuevo. En el descubrimiento de nuevas emociones que los habitan, irán recorriendo el camino de conocerse, acompañados y guiados por su maestra, Alma”.

El hecho de que la acción transcurra en la escuela no es meramente una decisión locativa. Así explica la directora esta determinación que acerca la historia a la experiencia cotidiana de sus espectadores: “Transcurre en el ámbito escolar porque creemos que ahí puede estar el reflejo y la resonancia cuando estos niños con túnicas blancas lleguen a las diferentes escuelas del país, quizás con historias semejantes. La idea es que los docentes tengan material educativo para seguir trabajando la temática en clase, que nada pase porque sí y que volvamos a poner las emociones y el autodescubrimiento como centro, pero no como un decir así nomás, como un eslogan, sino empezar a escucharlos de verdad, sean como sean. Los docentes tenemos mucho que aprender también, es la idea”.

Ese miedo también es mío. Sábados 17, 24 y 31 a las 15.00 en La Incorrecta (Gonzalo Ramírez 1595 esquina Lorenzo Carnelli). Entradas: 098 792 020. Más información: [email protected].