La investigación penal alrededor de Alejandro Astesiano, exjefe del Servicio de Seguridad Presidencial hoy preso por múltiples delitos, involucra a varias jerarquías policiales. A partir de la pericia del celular de Astesiano, se obtuvo toda la información borrada de su celular. Con este relevamiento se pudo saber que el exjefe de la custodia presidencial mantenía múltiples contactos de apariencia irregular o delictiva con jerarquías policiales a las que les pedía “favores”.
Inicialmente trascendió que al menos dos jerarcas policiales del Ministerio del Interior estaban indagadas en el caso. Una de las jerarquías policiales indagadas es Héctor Ferreira, subdirector de la Policía. La otra es Henry de León, director de la Dirección de Fiscalización de Empresas del Ministerio del Interior. Ambos se negaron a declarar hasta el momento, y van a resolver si declaran o no en base a la evidencia que hay en la carpeta de investigación.
El Ministerio del Interior emitió un comunicado en el que apuntó contra la prensa y planteó que jerarquías policiales asociadas al caso Astesiano son “víctimas” de difamación. La cartera afirma que se lesiona la “integridad” y el “honor” al exponerlos como “culpables” ante la opinión pública en “contravención al principio de inocencia”. También se planteó que iniciaron una investigación administrativa para las jerarquías policiales involucradas.
Por su parte, el ministro del Interior Luis Alberto Heber apoyó a las jerarquías policiales indagadas y dijo que “están de licencia” mientras el Ministerio del Interior los investiga. Para Heber “no son culpables” aún y “cuando sean culpables se tomarán las medidas”. El ministro entiende que están “fortalecidos” porque “nosotros mismos somos los que autodepuramos la Policía”.
Según informó El País, son seis los jerarcas policiales que son investigados por vínculos con Astesiano. La Dirección Nacional de Inteligencia envió un informe a la fiscal Gabriela Fossati en el que se plantea que extrajeron los contenidos de los celulares a seis jerarcas de la Policía. Los jerarcas son de la Guardia Republicana, de Bomberos y de la Jefatura de Policía de Rocha.
Además, se aportó el contenido del celular de dos civiles, según consigna el mismo medio. Uno de ellos es un empresario.
La Fiscalía intenta determinar quién es la jerarquía a la que Astesiano menciona como “el 1 del ministerio”. “Lo va a arreglar, ya te digo que demora dos o tres días, cuatro días. Aparte es el 1 y lo va a hacer ahí mismo. Va por Cancillería”, dice en un mensaje en referencia a este jerarca.
Los chats de Astesiano revelan que ofrecía autos oficiales de Presidencia de la República para ir a buscar al aeropuerto a los rusos a los que falsificaba documentos: “Veo con el presidente la agenda que tenemos y ya arreglamos todo, ¿ta? Es más, yo ahora apuro eso, para que sigan adelante con eso así me firman estos y ya está, ¿ta? Así ya está todo pronto, ¿dale? Y si querés nosotros mismos los vamos a esperar al aeropuerto. Mando un auto de nosotros”.
Además, en los mensajes se revela que el exjefe de la custodia presidencial recibía amenazas de “ser visitado” por sus “incumplimientos” y “mentiras”. También se sugiere que gestionaba pasaportes diplomáticos falsos.