El regreso de Ida Vitale a Uruguay significó, a la vez que su presencia en el país que la vio nacer, una vuelta a nuestro mercado editorial. En efecto, si el año pasado se presentó la versión uruguaya de El ABC de Byobu (que había sido editado por primera vez en México en 2004), este comienza con la publicación de De plantas y animales: acercamientos literarios (Estuario, $ 500), originalmente aparecido en 2003.

En esta ocasión, en prosa como en el libro anterior (también de la editorial Estuario), la reciente ganadora del premio Cervantes arma con erudita proliferación de citas y una escritura que discurre entre lo enciclopédico y lo poético un catálogo caprichoso de, como el nombre indica, especímenes del reino vegetal y animal, y con una mirada inquieta e inteligente, entreteje referencias literarias con datos científicos y anécdotas personales o ajenas.

De este modo, en su recorrido a medio camino entre el bestiario, el ensayo autobiográfico, el poema en prosa y el diccionario, el libro está habitado por exuberantes monstruos, mascotas ilustres y de las otras, vegetales y legumbres, árboles y hongos y también por las personas que, con delicado celo o feroz arrogancia, conviven en este fabuloso mundo al que Vitale da un orden, que, aunque antojadizo y endeble como cualquiera, conmueve por su generosidad y la felicidad recatada de sus muchos hallazgos.