La centralidad que ganó el liderazgo de Donald Trump marcó la Convención Nacional Republicana que se celebró esta semana. A diferencia de la situación que atraviesa el Partido Demócrata, en el que muchos cuestionan si es conveniente que el presidente estadounidense Joe Biden se presente a la reelección, entre los republicanos la unidad detrás de su candidato parece no encontrar desafíos.

“Va a ganar en noviembre y cuando lo haga todos vamos a ser campeones de nuevo. Ha sido el mayor patriota y lo sigue siendo”, dijo la estrella de la lucha libre Hulk Hogan, uno de los partidarios de Trump que habló en la convención. “Después del atentado contra su vida la semana pasada, ya es suficiente. Dejemos que la Trumpmanía se vuelva loca, hermano. Hagamos que Estados Unidos vuelva a ser grande”, arengó.

Entre el público se veían personas que llevaban una venda en la oreja similar a la que tenía Trump, que fue herido el sábado en un atentado, durante un acto de campaña en Pensilvania.

“Oí un fuerte zumbido y sentí que algo me golpeaba, muy muy fuerte en la oreja derecha”, relató el candidato a última hora del jueves, frente a los asistentes a la convención. “Me dije: ‘¿Qué fue eso? Sólo puede ser una bala’”, agregó durante su discurso de aceptación de la candidatura a la presidencia.

“Supe de inmediato que era muy grave, que estábamos bajo ataque. Y luego, en un momento, caí al suelo”, relató. “Había sangre por todos lados y sin embargo, de cierta manera me sentía muy seguro porque tenía a Dios de mi lado”, dijo.

Al levantarse sintió “un gran dolor”, pero quería transmitirles a sus seguidores que estaba bien. “Levanté mi brazo derecho, miré a los miles y miles de personas [...] y comencé a gritar ‘Lucha, lucha, lucha’”. Algunos en el público de la convención lloraban escuchando ese relato y el grito de “Lucha”, que se repitió varias veces en el encuentro.

“La bala del asesino estuvo a un cuarto de pulgada de quitarme la vida”, dijo Trump. “Si no hubiera movido la cabeza, la bala del asesino habría entrado perfectamente y yo no estaría aquí esta noche, no estaríamos juntos”, dijo, y afirmó que fue “Dios” quien lo salvó.

Ante sus seguidores, expuso el uniforme del bombero Corey Comperatore, un asistente al acto de Pensilvania que murió por otro disparo del atacante, un joven de 20 años que fue abatido mientras sostenía el arma.

A lo largo de los tres días que duró la convención, todos los elogios fueron para Trump. Incluso sus rivales en las primarias del Partido Republicano, la exembajadora en la ONU Nikki Haley y el gobernador de Florida, Ron DeSantis, aparecieron completamente alineados con el expresidente. “No hace falta estar de acuerdo con Trump el 100% de las veces para votarlo. Se los digo yo”, manifestó Haley.

Promesas electorales

Está previsto que Trump y su compañero de fórmula, el senador por Ohio James David Vance, conocido como JD Vance, participen este sábado en su primer acto político juntos en Michigan, un estado que se ha inclinado tanto hacia los demócratas como hacia los republicanos en las últimas elecciones.

Allí llevarán sus propuestas y su discurso contra el actual gobierno. “El daño que Biden le ha hecho a este país es impensable”, dijo Trump durante la convención.

En su discurso prometió cerrar las fronteras de inmediato a la “invasión migrante” y bromeó con que la próxima convención republicana se hará en Venezuela. Dijo que ese país es más seguro que el suyo después de enviar a todos los “delincuentes” a Estados Unidos.

Los planes para un eventual nuevo gobierno de Trump, algunos presentados antes de la convención y otros durante el encuentro, incluyen llevar adelante la mayor deportación de migrantes en la historia de Estados Unidos. El candidato ha prometido también que impedirá el ingreso al país de personas provenientes de varios países musulmanes.

El jueves Trump también cuestionó la política internacional de Biden, y prometió: “Pondré fin a todas y cada una de las crisis internacionales que la actual administración ha creado, incluyendo la horrible guerra con Rusia y Ucrania, que nunca habría ocurrido si yo fuera presidente, y la guerra causada por el ataque a Israel, que nunca habría ocurrido si yo fuera presidente”.

El alcance de su posición hacia la guerra en Ucrania preocupa a los socios europeos de Estados Unidos ante la perspectiva de que corte el envío de fondos para ese país. En cuanto al conflicto en Medio Oriente, Trump se ha manifestado claramente a favor de defender a Israel.

En política económica, el candidato a la vicepresidencia dijo que el actual gobierno, por ser parte de la “clase gobernante” perjudicó a la industria y a la clase media con tratados de libre comercio. El senador afirmó: “Joe Biden metió la pata y pueblos como el mío pagaron el precio”.

El plan de Trump incluye aplicar una política proteccionista, con aranceles a los productos importados. En particular, se propone poner una barrera a la importación de autos eléctricos provenientes de China y promover su fabricación en Estados Unidos. Otras medidas son la de producir petróleo y gas natural para que bajen los precios de la energía, y recortar impuestos.

Durante la convención estuvo presente el problema que enfrenta Trump en la Justicia, en la que tiene varias causas abiertas, que el expresidente atribuye a una persecución política. Al respecto, su plan es “ordenar” el Departamento de Justicia para desmantelar lo que él llama “Estado profundo”.

Por otra parte, Trump se propone dejar en manos de cada estado la regulación del acceso al aborto, que el sector más derechista del Partido Republicano quiere limitar o prohibir, desde que fue derogado un fallo de la Corte Suprema que legalizaba la interrupción del embarazo. Este ha sido uno de los puntos de confrontación con Biden durante la campaña.

Dudas sobre Biden

El viernes otros diez legisladores del Partido Demócrata se unieron a las voces que llaman a Biden a que abandone su candidatura a la presidencia y deje paso a que la Convención Nacional Demócrata elija a otro candidato en agosto. Ya son 32 diputados y tres senadores los que adoptaron esta posición.

En una columna titulada “Es hora de pasar la posta”, publicada en el diario Chicago Tribune, el congresista por Illinois Sean Casten dijo que le “rompía el corazón decirlo”, pero que Biden “ya no está a la altura del cargo”.

Más tarde, cuatro legisladores manifestaron en un comunicado que sienten una “gran admiración” por Biden, pero que existen preocupaciones por su “edad y aptitud” para gobernar otros cuatro años. “Creemos que lo más responsable y patriótico que puede hacer en este momento es retirarse como nuestro candidato”, afirmaron, según citó Efe.

Sin embargo, la jefa de la campaña de Joe Biden, Jen O'Malley Dillion, dijo que aunque se ha “visto cierta caída en el apoyo” a Biden, se trata de “un movimiento pequeño” y “el presidente está en carrera”. Afirmó que Biden “es la mejor persona para enfrentarse a Donald Trump” en las elecciones de noviembre.

Más tarde, en un comunicado, el propio Biden manifestó que está “deseando volver a la campaña electoral la semana que viene”.