Tras largas horas de espera, más de seis después de que cerraron los circuitos electorales, el Consejo Nacional Electoral (CNE) venezolano informó que el presidente Nicolás Maduro fue reelecto para un tercer mandato, derrotando en las elecciones al principal candidato opositor, Edmundo González Urrutia, de la coalición Plataforma Unitaria Democrática (PUD).
Según los datos del CNE, que denunció haber sufrido un ataque informático que retrasó la difusión de los datos, Maduro, con el 80% de las mesas escrutadas y con una participación del 59%, consiguió el 51,20% de los votos, contra 44,20% que obtuvo González Urrutia. Los restantes candidatos consiguieron el 4,6% de las adhesiones.
Si bien al comienzo de la noche la líder opositora María Corina Machado y el candidato de la PUD se mostraron plenamente confiados en el triunfo de su coalición, con el correr de las horas comenzaron a aparecer en los medios connotados dirigentes oficialistas dejando ver su alegría por los resultados, al tiempo que miles de personas salieron en plan celebratorio a las calles de Caracas, particularmente hacia la zona de Miraflores, donde se encuentra el Palacio presidencial.
Cuando aún el CNE no había dado los datos oficiales, Delsa Solórzano, representante política de la oposición ante el organismo electoral, denunció en una conferencia de prensa el retiro de los testigos de los centros de votación y la falta de transmisión de las actas para la totalización del resultado. “Estamos observando una importante cantidad de centros de votación donde están retirando a nuestros testigos, otros donde se están negando a transmitir el resultado del acta. El proceso es que se imprime la primera acta de escrutinio, se hace la transmisión y luego se imprime el resto de las mismas. Esto es un patrón. Sin embargo, podemos decir que con las actas que tenemos podemos saber lo que está pasando en el país”, expresó.
Horas antes, contrastando con los dichos de Solórzano, el fiscal general de la nación, Tarek William Saab, ofreció declaraciones en las que destacó el desarrollo de los comicios y dijo que se trató del “proceso electoral con menores incidentes” en los últimos siete años. Saab también aseguró que el Ministerio Público se encuentra en contacto con “la mayoría de los observadores electorales nacionales e internacionales”, en un proceso electoral altamente cuestionado por la anulación de invitaciones a observadores electorales internacionales, entre otras una de la Unión Europea.
Si bien durante el día la jornada electoral había sido en general tranquila, pese a que hubo algunas denuncias sobre delegados opositores a los que no les fue permitido o les fue demorado su ingreso a los locales en los que debían actuar como fiscales, luego de finalizada la votación se registraron incidentes y enfrentamientos entre seguidores del oficialismo y de la oposición. El motivo fue que en muchos lugares de votación de Caracas y otras ciudades, ciudadanos pretendían ingresar para seguir el conteo de votos, pero su ingreso, en contra de la normativa vigente, les fue prohibido, aunque luego, debido a la insistencia, lo pudieron hacer en medio de un clima de tensión creciente, mientras el CNE aún no había dado ningún dato oficial.
Fuera de Venezuela, en muchos países de América Latina y Europa hubo masivas manifestaciones callejeras de ciudadanos venezolanos en favor de la oposición, pero la enorme mayoría de ellos no pudieron votar. Según lo que informó France 24, de los aproximadamente cinco millones de venezolanos que están viviendo en el extranjero y están en condiciones de sufragar, únicamente lo hicieron cerca de 70.000, lo que representa menos del 1,5% del total de esta población. La diáspora venezolana denunció que hubo muchos obstáculos para inscribirse en las sedes diplomáticas y que el lapso fue de menos de 30 días, un plazo mucho menor que en elecciones anteriores.
La reacción más extemporánea sobre lo sucedido en Venezuela, aun antes de que se conocieran los resultados, fue la del presidente argentino, Javier Milei, quien en su cuenta de X escribió: “DICTADOR MADURO, AFUERA!!! Los venezolanos eligieron terminar con la dictadura comunista de Nicolás Maduro. Los datos anuncian una victoria aplastante de la oposición y el mundo aguarda que reconozca la derrota luego de años de socialismo, miseria, decadencia y muerte. Argentina no va a reconocer otro fraude, y espera que las Fuerzas Armadas esta vez defiendan la democracia y la voluntad popular. La Libertad Avanza en Latinoamérica”.
Por su parte, en el correr de la noche y mientras seguía sin conocerse dato alguno sobre la votación, el gobierno de Colombia encabezado por Gustavo Petro manifestó estar “a la expectativa de la divulgación de los resultados de las elecciones por parte del Consejo Nacional Electoral de Venezuela. El conteo de votos debe hacerse con plenas garantías para todos los sectores. Reafirmamos nuestro apoyo a la paz y la democracia en el hermano país”.