El reloj marcaba las 8.09 cuando el expresidente José Mujica puso el sobre con su voto en la urna. El Pepe fue una de las primeras figuras políticas en votar, minutos después de que abrieran los circuitos en el marco del referéndum sobre 135 artículos de la ley de urgente consideración (LUC) que se desarrolla hoy en Uruguay.

“No hay ningún triunfo ni ninguna derrota, es un paso cívico y de madurez que da el país”, dijo Mujica en una rueda de prensa después de sufragar, consultado sobre si una eventual victoria del No significaría un triunfo del gobierno.

“Vendrá el tiempo, en el cual yo no estaré, en el que la civilización digital va a evolucionar, va a haber cambios institucionales y probablemente recursos como este, en este mundo digital, van a ser cuasi sistemáticos y van a responder a la madurez que vayan tomando las sociedades. Todavía somos un poco bárbaros, pero la democracia se va a ir afinando, porque en la construcción de una sociedad digital existen todas las condiciones para consultar a la gente e incorporarla a las decisiones”, expresó el exmandatario.

“El mundo sigue dando vueltas”, agregó, cuando le preguntaron cómo continuará el país tras la consulta popular. “Dentro de una semana corregirán los números del combustible, tiraremos un poco la bronca, nos quejaremos, y espero que haya negociaciones en la guerra de Ucrania y afloje un poco el mundo”, señaló.

Por otro lado, Mujica dijo que, más allá de cuál sea el resultado, el diálogo entre el oficialismo y la oposición “no va a depender del Frente Amplio”, sino que “el que da el juego es el gobierno”. En ese sentido, aseguró que “el problema central está mucho más allá de la campaña”. A su entender, tiene que ver con un “cambio de época, de que lo que se nos viene encima es la sociedad de conocimiento”. Para pertenecer, “tendremos que buscar la forma de gastar una fortuna en las cabecitas de las generaciones que nos van a suceder. La tecnología y la ciencia son caras, no se pueden enseñar en un pizarrón. Y cumplir con aquel legado artiguista: ‘Sean los orientales tan ilustrados como valientes’. Resulta que ahora, si no somos letrados, vamos a quedar para lavarle los pisos al mundo rico. Ese es el desafío que tenemos como nación. Después podemos ser blancos, colorados, verdes, pero tenemos un problema de calidad intelectual de toda la población”, puntualizó.

Para Mujica, más allá de que “muchos proponen” una reforma educativa –como la que plantea el actual gobierno–, el “problema” es que “no hemos incorporado mecanismos para que el pueblo cuide su propia educación, queremos arreglarla desde arriba”.

Consultado acerca de si una victoria del No sería un respaldo al gobierno, que iría en línea con la buena imagen que le dan las encuestas al presidente Luis Lacalle Pou, Mujica dijo que “el presidente no es sólo el gobierno” y que Uruguay es “una democracia de partidos, de fuerzas colectivas”. “Tendemos a simbolizar las cosas alrededor de una figura, pero no hay magos en la historia. La imagen es importantísima, pero la imagen pasa y las realidades quedan”, agregó.

Acerca del papel que jugó Lacalle Pou en la campaña, apuntó: “Es la primera vez que un presidente se mete en una campaña electoral, pero alguna vez tiene que ser la primera vez”.

Mujica aseguró que va a esperar los resultados electorales en su casa, junto con la exsenadora Lucía Topolansky, su pareja, porque todavía no hay una “normalidad” total y tiene que cuidar su salud. “Porque amo a la política y a mi pueblo, pero amo mucho la vida”, remató.