La comisión especial de la Cámara de Diputados que tiene a estudio el proyecto de ley elaborado por el Poder Ejecutivo para reformar la Caja de Jubilaciones y Pensiones de Profesionales Universitarios (CJPPU) recibirá este lunes a una delegación del Colegio de Contadores, Economistas y Administradores del Uruguay (CCEAU).

El gremio concurrirá al Parlamento con una postura de rechazo a la reforma. El sábado, en el marco de una asamblea extraordinaria, el CCEAU aprobó por mayoría una declaración de rechazo a la iniciativa, la cual, se sostiene, “contiene errores significativos de diseño” y, en caso de aprobarse, “generará mayores desequilibrios, conduciendo a la desaparición de este sistema previsional y a una carga para la sociedad toda”.

El proyecto establece, entre otras cosas, un aumento de la tasa de aportación, un nuevo gravamen para los jubilados y aportes económicos del Estado desde Rentas Generales que sólo en el transcurso de este año serán equivalentes a 110 millones de pesos por mes.

En la resolución de la asamblea extraordinaria, el CCEAU afirma que el proyecto presentado por el actual gobierno “no atiende las causas de la crisis” que atraviesa la CJPPU, cuyas reservas de capital, se estima, se agotarían en julio.

Según el colectivo de contadores y economistas, “la principal causa de la crisis se encuentra en la cantidad de profesionales que mediante declaración de no ejercicio no realizan aportes a la caja”. Al respecto, la CJPPU contabilizó en la memoria del año pasado 109.719 declaraciones de no ejercicio, que corresponde a 63% del total de profesionales universitarios.

En tal sentido, el CCEAU sostiene que, dado que una parte de los aportes que hacen los profesionales dependientes “vía BPS [Banco de Previsión Social] no financian al BPS, sino que son aplicados lucrativamente por las AFAP [Administradoras de Fondos de Ahorro Previsional]”, una parte de estos “recursos destinados a las AFAP podrían destinarse a la CJPPU como aporte del profesional en primera categoría, dándole el derecho a continuar la carrera profesional”.

En diálogo con la diaria, la presidenta del CCEAU, Cristina Freire, señaló que la propuesta sería sólo para aquellos profesionales que “superan determinado monto de sus ingresos y aportan a la AFAP”; de dicho aporte al régimen de ahorro individual se descontaría a favor de la CJPPU “el equivalente a la escala uno” del sistema de fictos, alrededor de “6.000 y poco de pesos”, apuntó.

Freire indicó que este planteo “es nuevo” y afirmó que no pretende “castigar a los dependientes”. “No tocamos los valores que recibe el dependiente, que sigue recibiendo el mismo dinero. La única diferencia es que, en vez de aportar equis por ciento a la AFAP, vaya un poquito a la Caja, y de esa manera los déficits se van aplacando y la Caja dejaría de tener este problema tan grave que está teniendo”, expresó. En la resolución del CCEAU se sostiene que este redireccionamiento “es la solución más eficiente” y “no requerirá un mayor esfuerzo de toda la sociedad”.

Con este cambio, “los profesionales que hoy aportan vía BPS/AFAP” podrán, “con la misma suma de aportes”, iniciar la carrera profesional y tendrán la posibilidad de “mejorar sus haberes jubilatorios, obteniendo un retiro adicional a través de la CJPPU”, agrega el gremio.

Para el CCEAU, “el esfuerzo contributivo con fines previsionales debe ser compartido entre todos los profesionales, independientemente de la forma de relacionarse con quien contrata sus servicios, sea dependiente o independiente, como fue el espíritu de los fundadores de la Caja en 1954”.

“El corazón del problema”, según el gobierno

La semana pasada, el subsecretario del Ministerio de Economía y Finanzas, Martín Vallcorba, sostuvo ante la comisión especial de la Cámara de Diputados que el principal problema de la CJPPU es el “desequilibrio muy grande” que existe entre “los aportes que realizan los activos y las prestaciones que reciben al momento de jubilarse”.

Según consta en la versión taquigráfica, Vallcorba indicó que actualmente los jubilados profesionales “están recibiendo una pasividad que es entre dos y tres veces superior a lo que aportaron a lo largo de la vida activa”, lo cual definió como “el corazón del problema”.

“Acá hay un subsidio implícito que es muy elevado. Todo el sistema de seguridad social de reparto en nuestro país tiene subsidios; en general, las prestaciones son superiores a lo que uno aporta a lo largo de su vida activa. Ese es parte del problema que también arrastra el sistema de seguridad social en todo el mundo. Pero, en este caso, ese desbalance, ese desequilibrio es muchísimo más marcado”, manifestó.

Asimismo, Vallcorba aseguró que, a diferencia de la reforma que fracasó en 2023, el actual proyecto “resuelve el problema financiero que tiene la Caja de Profesionales de manera estructural”. Señaló como “una diferencia sustancial” entre una iniciativa y la otra los aportes previstos de Rentas Generales y de los timbres profesionales. “Estamos hablando en un horizonte de 20 años de algo más de 800 millones de dólares por ambos conceptos, mayores a los que estaban previstos en el proyecto de 2023”, afirmó.